Seguí: «El alcalde generó confusión con sus declaraciones tras el fallo del concurso»

¿Qué ha llevado a esta decisión?

Es una decisión que se venía madurando viendo la situación de agresividad y de injurias que estaban apareciendo no solo en algunos medios, sino también en las redes. No solamente contra Antonio Banderas, sino también contra Starlite y contra nuestra labor como arquitectos. Llevamos cerca de diez años buscando este proyecto, y lo haremos, porque es la ilusión de nuestras vidas, pero en la crispación total en la que se había metido, y con este intento de anulación de un concurso de una manera tan agresiva, hemos pensado que quizás no era el momento más oportuno, y hemos optado por apartarnos de esta guerra que no va con nosotros.

¿Podría decirse entonces que la gota que ha colmado el vaso es la votación del lunes de la moción de Málaga para la Gente para anular el concurso de ideas?

Esto ha sido un proceso de muchas gotas. Ninguna por sí sola es suficiente, pero con todas juntas y rematadas con el intento de suspensión del concurso se superaba una línea roja en la que teníamos que tomar esta decisión. Eso no quiere decir que hayamos abandonado este proyecto. Simplemente dejamos este concurso, y buscaremos hacer el teatro de Antonio Banderas en otro lugar de la ciudad. Hay quien ha dicho en otro lugar de España. No. Es esta ciudad la que quiere Antonio para hacer su teatro.

¿Le ha sorprendido la postura del grupo de Ciudadanos en la votación del lunes, alineándose con los partidos de izquierda que pedían la anulación del concurso de ideas?

No la he entendido porque es un grupo que ha defendido públicamente este tipo de iniciativas, al igual que PP y PSOE. Tal vez están en contra del procedimiento seguido.

¿Podría entrar en las gotas a las que antes ha hecho referencia que el alcalde calificara de «normal» que sea su propuesta y la de Banderas la que gane el segundo concurso para la cesión del espacio?

Tanto Antonio como yo y el representante de Starlite solicitamos al Ayuntamiento que pusiera el listón muy alto en el segundo concurso para que se garantizara la alta calidad cultural del edificio. Después pude leer las declaraciones del alcalde respecto a que se iba a hacer un concurso basado en la figura de Antonio, creo que esto fue más un acto de deseo que de realidad, puesto que no era posible. Esto fue un flaco favor porque lo que generó es una confusión respecto a un acto administrativo que nunca tuvo esa intencionalidad, o al menos en las reuniones con los técnicos de Urbanismo jamás se dio esa opinión.

¿Ha podido también influir en esta decisión la postura de la Consejería de Cultura de limitar parcialmente la idea inicial en cuanto al número de plantas?

No, en absoluto. Nuestra intención siempre ha sido adaptarnos a las exigencias de Cultura y que tuvieran en consideración las características técnicas que debería tener un edificio con uso cultural.

¿Cree que el alcalde va a lograr convencer a Banderas de que reconsidere su decisión?

Tal y como está redactada la carta, y por las razones expuestas, entiendo que no tiene marcha atrás.