

Secciones
Servicios
Destacamos
Cada 4 de julio, sus callejuelas se llenan de banderas americanas, de militares vestidos de época, de marchas marciales y de la épica que rodeó su vida y su muerte. Es el día grande de los Estados Unidos de América. El día de la independencia. Los que aún no lo conozcan podrían llegar a pensar que el ceremonial, en efecto, sirve para honrar a los héroes de la batalla en cualquier pueblo perdido de los EE. UU. Pero no. Esta tradición cumple con la memoria a este lado del charco y sin salir de la provincia. Porque cada 4 de julio, la localidad de Macharaviaya se viste de gala para recordar a uno de sus hijos más ilustres, Bernardo de Gálvez.
El héroe malagueño, nacido en esta localidad de la Axarquía en 1746, llegó a las cotas más altas de la carrera militar, fue gobernador de la Luisiana y virrey de la Nueva España y sin su intervención en la batalla de Pensacola (1781), la historia de EE. UU. se escribiría, probablemente, de otra manera. La veneración de su legado en la que hoy es primera potencia mundial es tal que su retrato está en la galería de ilustres del Capitolio. Y convertir esa vida en novela es, casi, una obligación moral para los que aman la historia de la ciudad.
Que se lo pregunten si no al jurista y escritor Leonardo Cervera, que ha invertido casi una década en reconstruir la historia militar y vital del héroe de la independencia americana. Y lo ha hecho en 'Gálvez' (Almuzara), una novela histórica de más de 300 páginas que presenta este jueves, día 7, en la Sala Isabel Oyarzábal de la Diputación Provincial de Málaga (plaza de la Marina, 4). Unas semanas más tarde, el 29 de noviembre, Cervera hará parada con su novela en Macharaviaya, cuna del protagonista (19.00 horas en la cripta de los Gálvez).
Que la importancia histórica de Bernardo de Gálvez trasciende los siglos es algo que está fuera de toda duda. Otra cosa es que esté suficientemente reivindicada, sobre todo en su tierra natal. Cervera lo tiene claro: «Estamos ante un malagueño universal, a la altura de Picasso». Al menos en su caso, la admiración por el personaje le viene de lejos. El autor de la novela es un apasionado de la historia y a medida que investigaba sobre la huella de Bernardo de Gálvez «más fascinación me provocaba». La búsqueda en archivos americanos, a pie de historia, la hizo durante el año que vivió en EE. UU. Porque Cervera, además de escritor, es jurista y un alto funcionario de la Unión Europea. En la actualidad, ostenta el cargo de Secretario General del Supervisor Europeo de protección de Datos y está considerado un experto de referencia internacional en materia de privacidad e inteligencia artificial.
En sus ratos libres, Cervera se vuelca en la búsqueda en archivos históricos y de esa afición nace su nueva novela. También del equilibrio perfecto entre lo documental y la ficción, porque el autor se apoya en esa robusta base histórica tras diez años buceando en documentos antiguos con una trama novelada que sitúa a Bernardo de Gálvez en el centro de todo. «El libro repasa los orígenes malagueños del protagonista y se mete de lleno en los primeros años de su formación militar, entre México y Estados Unidos», avanza Cervera, que fija esos años en la llamada 'apachería', la primera línea de combate contra los apaches. «En aquella época, que se prolongó entre dos y tres años, ya era un militar de alto rango, pero es un episodio de su vida muy desconocido, por eso me 'picó'», añade el autor, cuyo relato se sustenta en los diarios de campaña que localizó en archivos de Arizona y México.
La tercera persona le sirve además a Cervera para incluir esa imprescindible nota de ficción que termina de darle el sentido a la historia. En concreto, 'Gálvez' le da voz a un personaje novelado, Juan de Arcila, mayordomo y «fiel servidor de la Casa de Gibralfaro'» que narra las aventuras militares y vitales de su admirado amigo. «Esa figura -celebra el autor- también me ha servido para recrear la Málaga del siglo XVIII, la ciudad ilustrada y llena de inquietudes» que vio nacer no sólo a Bernardo, sino a toda una generación de funcionarios «extraordinarios» que contribuyeron con sus logros no sólo ha hacer más grande la historia de España; también la de Estados Unidos. Ese fue el caso, por ejemplo, de otro Gálvez enorme: José de Gálvez, tío de Bernardo y todopoderoso ministro de Indias. «Sin duda, el mejor ministro de la historia de España», sostiene Cervera.
Pero las más de 300 páginas de 'Gálvez' no sólo hacen parada en los orígenes malagueños del protagonista y su labor en la 'apachería': el tercer gran escenario del argumento se desarrolla en Nueva Orleans, donde Bernardo de Gálvez contrae matrimonio «por amor» -algo poco usual en aquella época- con Felicidad Saint-Maxent La Roche, hija de un acaudalado comerciante y militar de origen francés con la que comparte proyectos en la alta sociedad, la diplomacia y la filantropía. En esta época, además, Bernardo de Gálvez comparte época (y familia política, porque eran cuñados) con otro militar malagueño clave en la historia de los Estados Unidos: Luis de Unzaga y Amézaga, el responsable, ni más de menos, de bautizar a los Estados Unidos con el nombre de Estados Unidos de América.
En este contexto, otro de los puntos clave de la novela es el reflejo de la personalidad de Bernardo de Gálvez. Y no sólo en lo militar, también en lo personal, una licencia que aporta el definitivo toque humano al personaje: «Se sabe que era un malagueño de pro, al que le gustaba la fiesta y que no se perdía un baile... Era un tipo muy cercano. Hay muchos testimonios que dan cuenta de que fue muy humano a pesar de las luchas cuerpo a cuerpo. Fue un gran líder», concluye Cervera, quien se permite dejar una última reflexión: «El problema es que murió muy joven, sólo con 41 años. ¿Quién sabe si con el tiempo necesario hubiera cambiado también la historia de España?». Quién sabe. Pero eso ya es el argumento de otra novela.
Publicidad
Publicidad
Te puede interesar
Publicidad
Publicidad
Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.
Reporta un error en esta noticia
Comentar es una ventaja exclusiva para suscriptores
¿Ya eres suscriptor?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.