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El Resucitado, en procesión.

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El Resucitado, en procesión. Eduardo Nieto

El Resucitado dignifica su imagen con el nuevo trono del Cristo en el cierre de la Semana Santa

El obispo se dirigió a los hermanos mayores para darles la «enhorabuena» y reconoció «ventajas e inconvenientes» del actual recorrido oficial

Rafael Rodríguez

Málaga

Domingo, 21 de abril 2019

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Con un año de retraso, por fin se hizo realidad el estreno del trono del Cristo Resucitado, ideado por Fernando Prini, curiosamente, coincidiendo con la inauguración del nuevo recorrido oficial que tanto ha dado –y dará– que hablar.

Con la procesión matutina del Resucitado, que constituye el pórtico del periodo de gloria, finalizó una Semana Santa que será recordada por la instauración del nuevo trazado oficial, con sus virtudes y sus defectos, por la apertura de la segunda puerta de la Catedral, que ha favorecido la entrada de las cofradías de Humildad y Paciencia y todas las secciones de Fusionadas, por las modificaciones horarias y del orden procesional de varios cortejos, por la resurrección de nuevos espacios y la casi defunción de otros, por la multiplicación de novedades patrimoniales después de casi una década de receso en este aspecto y, además, por la lluvia, que evitó las salidas de Fusionadas, Paloma, Sangre y Expiración, el Miércoles Santo –Mediadora tuvo que refugiarse en la casa hermandad de los Estudiantes y El Rico se dirigió directamente a la plaza del Obispo para presidir el acto de liberación del preso–, y Misericordia, el Jueves Santo, además de producirse cambios inesperados en los itinerarios de regreso de algunas corporaciones por las inclemencias meteorológicas.

Media docena de policías dieron escolta a los miembros de la Agrupación durante todo el itinerario

El actor Antonio Banderas presenció el último cortejo de la Semana Mayor a pie de calle en Santa Lucía

La Semana Santa de 2019 es ya historia. Y, en esta ocasión, tuvo un desenlace feliz, con la incorporación del nuevo trono del Cristo Resucitado, que, ciertamente, hacía falta de forma urgente para dignificar la imagen de la última procesión de la semana, colofón de los días santos.

La obra, ejecutada por artistas y artesanos malagueños, salvo el dorado, fue el blanco de todas las miradas, tanto de cofrades como de turistas que paseaban por el Centro, maletas incluidas, porque, en realidad, merece la pena su contemplación detenida. Elegante en su traza y en su talla, figuras exentas de santos para las capillas con un esmerado estofado, cartelas con textos latinos, basados en el misterio de la Resurrección, cuarterones pintados, arbotantes de orfebrería, compuestos por cuatro peculiares tulipas y un airoso farol... En definitiva, un sobresaliente conjunto, de estilo manierista, para el titular de la Agrupación de Cofradías, que se alzaba desde un catafalco apoyado en una sección troncopiramidal.

Cierto es que la entidad de San Julián, desde la Comisión encargada de esta procesión, viene trabajando desde hace algunos años en la mejora de una puesta en escena que, a todas luces, era indigna para una Semana Santa tan importante como la de Málaga y para la propia institución agrupacional, la más antigua de España. Sin embargo, y aunque las filas de nazarenos blancos –color de la Agrupación– han crecido y los varales de los tronos se han llenado, hacía falta algo más, como el estreno del trono del Señor de Capuz, que es una realidad.

El retraso acumulado por el taller encargado en la aplicación del dorado impidió su uso un año antes. Pero lo verdaderamente importante es que el titular de la Agrupación tiene ya unas andas procesionales definitivas a dos años vistas del centenario de la entidad de San Julián.

La comitiva del Resucitado se puso en marcha a las 10.00 horas, momento en que se abrieron las puertas del templo de San Julián. La banda de Bomberos figuró en la cruz guía.

Dieciocho minutos más tarde hizo su aparición el Cristo Resucitado, que partió desde San Julián con la Marcha Real, interpretada por la banda de cornetas y tambores del Carmen, seguida de 'Cristo del Amor', la popular composición de Alberto Escámez.

Una vez el trono en la calle, el presidente de la Agrupación,Pablo Atencia, dio los primeros toques de campana. Y luego lo hicieron dos de los artífices del conjunto lignario, el diseñador Fernando Prini y el escultor Juan Vega, quienes recibieron los elogios de varias personas en plena Nosquera por esta importante obra.

Cuando el Resucitado se perdió por Comedias, salió la Virgen Reina de los Cielos con serias dificultades, debido a los escalones del templo, que, tras un movimiento brusco, provocó la caída de la azucena de plata que llevaba la imagen en la mano izquierda. El reloj marcaba las 10.48 horas. La banda de música de la Paz atacó con el Himno Nacional y la marcha 'Reina de los Cielos', de Ginés Sánchez.

El cortejo discurrió por el recorrido oficial con normalidad, aunque, con el Señor en la calle Martínez, comenzó a chispear durante unos minutos. Sin embargo, más tarde salió el sol, que proporcionó más brillo, si cabe, al dorado del trono cristífero.

Llamó la atención la presencia de seis efectivos de la Policía Local dando escolta a los miembros de la Agrupación de Cofradías durante todo el itinerario.

Palabras del prelado

Llegados a la plaza del Obispo, el prelado, Jesús Catalá, desde las primeras escaleras del atrio de la Catedral, se dirigió a los hermanos mayores para darles la enhorabuena «aceptando los inconvenientes y las grandes ventajas del nuevo recorrido», dijo. «Hoy es un día grande, porque es la fiesta de la Pascua, la resurrección del Señor y eso es lo que estamos celebrando. Ya, a la Agrupación, le diré algunas sugerencias para el día de hoy. Esto no es una estación de penitencia, sino una procesión de alegría y de Pascua, así que, este acto lo prepararemos mejor el próximo año», advirtió monseñor Catalá antes de que se aproximara el trono del Cristo Resucitado a la puerta de la Encarnación de la Catedral.

La comitiva continuó su itinerario previsto y, en Santa Lucía, camino de regreso, tuvo un espectador de excepción: el actor Antonio Banderas a pie de calle.

El Señor de Capuz llegó a San Julián a las 14.45 horas con la marcha con la que salió: 'Cristo del Amor', mientras que el trono de la Virgen se recreó por Nosquera con 'Pasan los Campanilleros' y el 'Poema Sinfónico de la Semana Santa de Málaga', de Perfecto Artola.

El encierro de la imagen de Álvarez Duarte, que dio paso al tiempo de gloria, se produjo a las 15.30 horas con las dificultades del inicio y con mayor número de efectivos policiales.

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