Nuevo ataque de Arran contra el turismo en el puerto de Palma

En las imágenes, un grupo de personas vestidas con una camiseta granate muestran pancartas que animan a organizarse contra el turismo entre el humo de bengalas frente a un yate y lanzan confeti a los clientes de un restaurante.

El pasado jueves, cuatro encapuchados asaltaron en Barcelona un autobús turístico cerca de una parada del Camp Nou, donde hicieron una pintada en la parte delantera del vehículo en contra del turismo y pincharon una rueda, sin causar daños personales. Días después, mostraron en un vídeo cómo pinchaban las ruedas de las bicicletas turísticas habilitadas en la ciudad.

Este martes, políticos como el líder de Ciudadanos, Albert Rivera, criticaban las acciones de un grupo al que han bautizado como la 'kale borroka' catalana. "Los socios de Puigdemont y Junqueras quemando autobuses contra los extranjeros que van a Barcelona", lamentaba el líder del partido naranja a través de Twitter. También el portavoz del Govern, Jordi Turull expresaba su "condena" a los ataques y los desligaba del proceso soberanista.

Sin embargo, desde la CUP, la presidenta del grupo parlamentario, Mireia Boya, pedía desdramatizar unos hechos que considera "acciones simbólicas" contra el turismo. Una postura duramente criticada por el alcalde accidental de Barcelona, Jaume Collboni, del PSC, quien lamentaba que la CUP ha pasado "una línea roja que nunca debe cruzarse en democracia" al negarse a condenar el ataque.