El partido de Sánchez Gordillo abandona IU Andalucía

Según ha explicado la formación, que recuerda haber sido cofundadora de IU en 1986, los motivos de esta ruptura orgánica no son nuevos y se concretan en la oposición de esta corriente que supone apenas un 9 por ciento en IU y está asentada en la comarca sevillana de la Sierra Sur, y en menor medida en Málaga y Cádiza la política de pacto de Gobierno con el PSOE que ha puesto en

marcha la actual mayoría de IU, representada por el PCE. Una actitud que, dicen suponía entregarse a una parte de La Troika para administra recortes por imperativo legal y quebrar un proyecto político que dice ser anticapitalista.

La CUT subraya además que el acuerdo no ha representado una alternativa real a los problemas concretos de la gente, y ha cuestionado la falta de contundencia de IU con los casos de corrupción y la no denuncia del régimen clientelar montado por el PSOE en Andalucía. Asimismo, reprochan que tras la ruptura por parte del PSOE y la expulsión humillante de los consejeros de IU, no ha habido autocrítica de la dirección y nadie ha presentado su dimisión.

Desde IU, sin embargo, resaltan que la CUT llevaba mucho tiempo al margen de la formación que ahora encabeza Antonio Maíllo, y aseguran que se trata más bien de una ruptura de la propia CUT, dado que muchos de sus integrantes seguirán vinculados a IU. Así, solo se marcharán los más afines a Diego Cañamero, que tras la práctica desaparición de la escena pública de Juan Manuel Sánchez Gordillo por temas de salud se ha convertido en el dirigente más significado en los últimos meses por su acercamiento a Podemos y Teresa Rodríguez. Asimismo, apuntan al malestar de la CUT tras no poder ubicar a sus militantes en puestos destacados en la lista por Sevilla para las próximas elecciones autonómicas.