Los malagueños registran el mayor aumento de España en su ahorro en depósitos

Además, el crecimiento registrado en los depósitos de Málaga fue el mayor de entre todas las provincias españolas, seguido del contabilizado en otro territorio andaluz, Córdoba, donde la cifra atesorada en los bancos creció un 5,5%, hasta los 17.274 millones de euros. El mayor descenso también se registró en esta comunidad autónoma: lo protagonizó Almería, donde el ahorro bancario tuvo un recorte del 12%, hasta caer por debajo de los 14.000 millones.

Se trata de cifras que aglutinan los ahorros de empresas, particulares y también de las Administraciones Públicas, aunque en realidad el volumen correspondiente a estas últimas apenas es significativo. En Málaga, los depósitos del sector público no llegaban a los 1.500 millones de euros al cierre de 2023 -frente a los 1.700 millones de un año antes-. Con lo que, sin tener esta cantidad en cuenta, el ahorro del sector privado malagueño (familias y empresas) habría crecido un 7,8% en 2023, que también es el ritmo más elevado de toda España, al pasar de los 32.143 a los 34.659 millones de euros de un año para otro.

Del ahorro bancario de particulares y empresas, la mayor parte, más de 29.500 millones de euros, se encuentra en cuentas a la vista. El resto, algo más de 5.100 millones, está en depósitos a plazo. Como detalle importante, si bien la primera cifra se vio reducida en un 3,9% en el último año, la segunda aumentó un 266% (se multiplicó por tres veces y media). Mientras tanto, en España los depósitos a la vista se redujeron un 7,6% y los depósitos a plazo crecieron un 95% (se casi duplicaron). Algo tiene que ver en esta evolución el hecho de que subieran los tipos de interés en el último año y, con ellos, la retribución del ahorro.

Pero lo cierto es que Málaga no destaca en la evolución de sus depósitos únicamente en el último ejercicio. Si tomamos como referencia el año 2019, es decir, el previo al estallido de la pandemia, el ahorro bancario en la provincia ha crecido casi un 38%, al pasar de los poco más de 26.200 millones hasta los citados más de 36.000 millones. El correspondiente estrictamente a particulares y empresas, mientras, ha ascendido un 39%. En España, el aumento se limita al entorno del 16% en ambos casos.

¿Por qué Málaga despunta con la evolución de su ahorro? A juicio de Juan González Alegre, profesor de Teoría Económica de la Universidad de Málaga, hay dos factores: por un lado, el demográfico, porque la población en la provincia crece más que la media española y andaluza; y, por otro, señala que es posible que se esté enfriando la inversión en Málaga, como consecuencia de la subida de los tipos de interés, que encarece la financiación, mientras que por otro lado mejora la retribución del ahorro -aunque los bancos han arrastrado los pies a la hora de trasladar la subida del euribor a cuentas y depósitos-.

Antonio Pedraza, presidente de la comisión financiera del Consejo General de Economistas, realiza una interpretación algo diferente. Explica que Málaga tiene una capacidad de ahorro importante y que su incremento reciente a contrapié de lo que sucede en el conjunto de España obedece a que se trata de fondos a la expectativa de encontrar alternativas de inversión.

En su opinión, hay mucha demanda de vivienda en la provincia que está desatendida por falta de oferta: así, si bien hay pisos y apartamentos de lujo de más de un millón de euros que se van vendiendo poco a poco, no hay viviendas de tipo medio que son las que suscitan más interés comprador. De acuerdo con el análisis de este economista, el dinero atesorado en depósitos estaría destinado a la compra de este tipo de casas de gama media. Y argumenta que, de no ser así, en otras circunstancias, este dinero, en lugar de estar sobre todo en cuentas a la vista o en depósitos, se encontraría en fondos de inversión. Además, añade que en la provincia casi la mitad de las viviendas que se adquieren se pagan al contado, lo que es un indicio más de que hay dinero ahorrado destinado a inversiones.

La estadística publicada por el Banco de España este viernes también informa de la evolución del crédito, es decir, de las deudas contraídas con las entidades financieras. Y también aquí el comportamiento de Málaga difiere del conjunto de España. En el país los créditos se redujeron más de un 3,5% en el último año, al pasar de los 1,25 a los 1,20 billones de euros -millones de millones-. En cambio, en la provincia la cifra se mantuvo prácticamente sin cambios al filo de los 33.800 millones de euros, de los que apenas 311 millones corresponden a las Administraciones Públicas, cifra esta última ligeramente por encima de la de 2022 (282 millones de euros).

El economista Antonio Pedraza afirma que el país asiste a un proceso de desendeudamiento –amortización de préstamos– al que la provincia no es ajena, pero que en Málaga se ve compensado por la mayor inversión y la mayor apelación al crédito asociada, que provoca que la deuda global contraída con los bancos se mantuviera estable en 2023.

Las cifras corroboran el mayor dinamismo inversor de Málaga, porque ampliando un foco temporal se observa que desde 2019 el volumen de crédito -las deudas acumuladas- en Málaga crece cerca de un 9%, mientras que en el conjunto del país era a cierre de 2023 idéntico al de cuatro años antes, cuando también estaba clavado prácticamente en los 1,2 billones de euros.

De la comparación de las cifras de créditos y depósitos en la provincia se extrae la conclusión de que los malagueños tienen más ahorros que deudas. Aunque si en Málaga los depósitos (36.155 millones) cubren 1,06 veces las deudas, en España la ratio es de 1,25 veces, al comparar los 1,5 billones de depósitos con los 1,2 billones a que asciende lo adeudado.