
Secciones
Servicios
Destacamos
Su nombre saltó a los medios de comunicación el pasado mes de octubre ante la llamada de socorro de sus padres. Óliver, un niño malagueño que entonces no había cumplido aún los tres años, necesitaba ser trasladado de manera urgente desde México hasta España para ser operado de un grave tumor cerebral. La lucha de su familia y la aportación económica de un empresario anónimo que pagó el avión medicalizado hasta España permitieron que el pequeño fuera hospitalizado a tiempo en el Hospital Sant Joan de Déu de Barcelona, uno de los más prestigiosos en tratamiento del cáncer infantil.
Este lunes, cuatro meses después de aquella odisea para llegar a España, Óliver fue operado de nuevo, en la que es su tercera operación en Barcelona (antes ya tuvo una primera intervención en México). Se le ha logrado extirpar de manera total el resto del tumor que aún tenía el menor, menos de un 3% que quedó después de la primera cirugía a la que fue sometido a principios de noviembre.
Óliver se encuentra bien tras esta última operación y sigue dando pasos en su compleja recuperación. La operación de este lunes duró unas cinco horas y ahora el malagueño podrá iniciar un tratamiento de radioterapia en Madrid. Durante estos meses después de su última operación, Óliver ha recibido un tratamiento de quimioterapia en el marco de un ensayo clínico internacional. Con este tratamiento, los médicos esperaban poder reducir aún más el tumor o modificar sus condiciones para hacerlo más accesible y facilitar su extirpación total en otra cirugía, lo que se ha logrado finalmente esta semana. Una vez recuperado de esta intervención, el joven malagueño iniciará un tratamiento de radioterapia con protones en Madrid, en la Clínica Universitaria de Navarra, uno de los pocos centros con esta tecnología en España.
La familia de Óliver, que se mudó a Playa del Carmen (México), donde el padre trabajaba como instructor de buceo, se muestra satisfecha y esperanzada y han optado por alejarse de los medios de comunicación para tratar de recuperar algo de normalidad. Desde que pudieron regresar a España, la evolución del menor ha sido positiva, teniendo en cuenta que en México no se les garantizaba una atención rápida, pese a que se temía por la vida del pequeño.
Publicidad
Publicidad
Te puede interesar
Publicidad
Publicidad
Recomendaciones para ti
Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.
Reporta un error en esta noticia
Comentar es una ventaja exclusiva para suscriptores
¿Ya eres suscriptor?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.