Cualquier nueva zona azul de Málaga deberá funcionar primero en fase de pruebas
El Ayuntamiento incorporará en la ordenanza del SARE la implantación provisional y gratuita para residentes durante seis meses, algo que ya se aplicó de forma excepcional en Huelin y La Unión
El Ayuntamiento de Málaga va a modificar la normativa que regula la zona azul para obligarse a sí mismo a que cualquier nuevo espacio SARE ... que se vaya a implantar comience a funcionar primero en fase de pruebas y de forma gratuita para residentes durante seis meses para luego decidir, en función de los resultados, si los parquímetros se mantienen de forma definitiva. Aunque esta fórmula ya la aplicó el Consistorio en las dos últimas incorporaciones como fueron las de Echeverría de Huelin (455 plazas) y La Unión (258) para intentar aplacar las críticas de colectivos vecinales de ambas barriadas, lo cierto es que la Sociedad Municipal de Aparcamientos (Smassa) lo hizo entonces por decisión del presidente de la entidad, que es el alcalde, Francisco de la Torre. Ahora, la intención es introducir este requisito previo en la modificación legal en la que está trabajando el Área de Movilidad.
No será el único cambio, ya que también se va a incorporar al articulado de la ordenanza fiscal que regula los precios del SARE la reserva de plazas para los comerciantes a cambio de un bono mensual de 45 euros, algo que también se llevó a cabo en Huelin y que ahora se pretende extender al resto de calles teñidas de azul que hay repartidas por la capital. Con esta medida se pretende aumentar el apoyo a los comerciantes en aquellas calles con SARE, porque aunque sus negocios se puedan beneficiar de una mayor rotación de vehículos tienen que pasar por caja para poder estacionar.
Zona exclusiva para comerciantes
A día de hoy, mientras a los residentes se les bonifica la tarifa de forma que pueden estacionar 24 horas por 0,2 euros y toda la semana, por un euro (mismo descuento que para las personas con problemas de movilidad), salvo en el caso excepcional de Huelin a los negocios no se les aplica descuento alguno. Como mal menor, se les ofrece a los dueños un 20% de descuento en los abonos de los 'parkings' públicos más cercanos, mientras los trabajadores no obtienen ningún tipo de rebaja. Por ello, con este cambio se persigue instaurar la reserva de un número determinado de estacionamientos azules (en torno al 10%) para uso exclusivo de propietarios y empleados de los negocios a cambio del citado bono.
Por último, el Ayuntamiento aprovechará el trámite para acometer otra cuestión formal que en nada afecta a los usuarios: separar las partes fiscal y administrativa de la ordenanza, de forma que las tarifas queden recogidas en la ordenanza fiscal mientras otras cuestiones como las relativas al proceso para asignar la tarjeta de residentes figure en otro texto.
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