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Dos empresas españolas diseñarán el dron europeo que explorará Marte

Dos empresas españolas diseñarán el dron europeo que explorará Marte

El proyecto AERIAL es la apuesta europea para conquistar el cielo del planeta rojo

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Miércoles, 23 de marzo 2022, 16:50

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Quizás los españoles (y los humanos, en general) tengamos que esperar para poner un pie en Marte, pero la marca 'Made in Spain' estará presente en el primer dron que la Agencia Espacial Europea (ESA) enviará al espacio para explorar el planeta rojo. La expedición se enmarca en el proyecto AERIAL -la competencia directa del dron Ingenuity, de la NASA- y las empresas elegidas para diseñar el vehículo aéreo no tripulado son las españolas SENER Aeroespacial, proveedora de sistemas aeroespaciales, y Aerdron, organización especializada en el diseño de drones.

Se trata de un gran desafío tecnológico en el que destacan tres grandes obstáculos. El primero, que la densidad de la atmósfera de Marte es cien veces menor que en la Tierra. El vuelo de los drones con hélices usan el aire como medio. A menor densidad atmosférica, menos eficientes son las hélices (empujan poco), por lo que estas deben ser grandes, largas y finas (casi como cuchillos), al mismo tiempo que se reduce y optimiza la masa del dron al máximo, aunque en este caso la gravedad nos da tregua, pues es un tercio de la que tenemos en la Tierra», explica Guillermo Rodríguez, director del proyecto Aerial en SENER Aeroespacial.

El segundo inconveniente, también relacionado con la densidad atmosférica, es la menor capacidad del dron para intercambiar calor (cuanto menos aire, menos capacidad de refrigeración). «Eso puede llevar a los motores y la electrónica del aparato a alcanzar temperaturas muy altas, por lo que necesita un sistema de evacuación del calor delicado y pesado», aclara Rodríguez. Y en tercer lugar, «el dron debe ser completamente autónomo, pues no habrá nadie para pilotarlo (no se puede operar en tiempo real), y tener cierta tolerancia a los fallos, al no poder repararse una vez en Marte».

Seis hélices

Para sortear estas dificultades, el dron propuesto tiene seis hélices. «Es una configuración conocida en el mundo de los drones como Y6, que consiste en tres brazos separados 120º (en forma de «Y») con dos motores en cada uno de ellos que giran en sentidos contrarios para poder controlarlo», cuenta Rodríguez, quien afirma que esta es una de las razones por las que la ESA les ha elegido. «Esta configuración es diferente a la usada por la NASA en su dron marciano, y nos ofrece varias ventajas, como por ejemplo, mayor tolerancia a los fallos, pues nuestro vehículo puede volar con un motor averiado o incluso dos, en ciertas condiciones», añade.

Consola de prueba del sistema de propulsión.
Consola de prueba del sistema de propulsión. SENER/ESA/AEDRON

El dron español está pensado para volar a una altura de entre 5 y 10 metros del suelo, para evitar levantar el polvo marciano, tendrá un alcance de un kilómetro desde el rover (vehículo de exploración del suelo) del que despega, que le proporcionará el cambio y carga de la batería, y llevará varias cámaras de alta resolución para tomar imágenes y recrear un mapa 3D del terreno. También irá preparado con protectores frente al frío, con sistemas de disipación del calor y con mecanismos para evitar la entrada de polvo marciano en su electrónica y motores. Además, contará con un equipo de navegación autónoma que le permitirá calcular la altura, determinar la posición del rover base y volar hasta el punto seleccionado sin necesitar un piloto.

Lo interesante de los drones de exploración espacial, frente a otro tipo de vehículos no tripulados, como los rover, es que permiten sortear los problemas del terreno, una superficie no preparada y desconocida, llena de obstáculos, piedras, hondonadas y arena. Además, puede acceder a más lugares, tomar imágenes más amplias (desde más altura) e incluso aterrizar y despegar de lugares inaccesibles. Las desventajas, entre otras, estriban en la ligereza necesaria para alzar el vuelo, lo que impide llevar grandes cargas, como sí lo hacen los vehículos de suelo. Sin ir más lejos, el peso de las baterías, y por lo tanto su carga, limita el alcance (en distancia) y el tiempo de vuelo del dron.

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La fase de diseño y prototipado del este aparato durará entre dos y tres años y dará una idea de cómo será el futuro dron marciano europeo, pero será un dron listo para volar en Marte. Es decir, solo será un demostrador de tecnología que volará en un simulador diseñado para reproducir las condiciones ambientales y la superficie polvorienta del planeta rojo. «Hay muchas más fases de diseño, pruebas y verificaciones que habrá que superar antes de enviar nada al espacio, y mucho menos a otro planeta, y aunque este demostrador no será el que se envíe finalmente a Marte, gran parte de su diseño y tecnología servirán para la construcción del dron marciano europeo que volará al espacio», declara el especialista.

Un impulso para la industria española

Esta no es la primera vez que la ciencia española participa en un proyecto de estas características. SENER Aeroespacial tiene gran experiencia en el diseño, integración y validación de sistemas espaciales y ya ha participado en el desarrollo de unidades marcianas, como el rover Perseverance para la misión Mars2020 de la NASA, actualmente operando en suelo marciano, y el rover Curiosity para la misión MSL de la NASA, así como ha contribuido con tecnología en las misiones ExoMars 2016 y 2022 de la ESA. Por su parte, Aedron, tiene más de 20 años de experiencia trabajando en proyectos experimentales de aviación y espaciales en EE UU y Europa.

«Para la industria espacial española, en este caso SENER Aeroespacial y Aerdron, ser capaces de diseñar un prototipo capaz de volar en un entorno simulado, que reproduce las condiciones de Marte, nos posiciona como los primeros en Europa en contar con esta tecnología. La experiencia nos servirá para demostrar las capacidades de nuestra industria en el desarrollo de equipos altamente sofisticados, capaces de volar en la atmósfera de otro planeta», celebra Rodríguez.

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