Un galardón para Saint-Supery que es una garantía de éxito

El listado se hace especialmente selecto desde la edición de 2006, cuando el mejor del torneo fue el español Ricky Rubio (uno de los otros tres compatriotas de Saint-Supery en ganarlo), que en su momento estableció una marca en el baloncesto español al haber sido el jugador más joven (14 años, 11 meses y 24 días) en debutar en un partido de la Liga ACB y va a comenzar su duodécima temporada en la NBA, con dos medallas olímpicas y siendo campeón mundial absoluto en 2019.

También siguen en Estados Unidos Jonas Valanciunas, que acumula once años en la mejor liga mundial de baloncesto; Killian Tillie, enrolado en los Grizzlies; Usman Garuba, en los Rockets, y Killian Hayes, en los Pistons. Pasaron por la NBA los balcánicos Dario Saric (cinco años), Mario Hezonja (exazulgrana) y Dzanan Musa, los dos últimos recién llegados al Real Madrid y el escolta, el MVP de la Liga Endesa 2021-22 en el Breogán.

En la lista hay también otros dos exjugadores del Unicaja: Dejan Musli (pasó sin pena ni gloria en la 2016-17) y Rubén Domínguez, promesa gaditana de Los Guindos que obtuvo ese logro ya fuera de la cantera. Se fue al Torrelodones, antes de recalar en el Estudiantes. Curiosamente, ha sido el predecesor de Saint-Supery.

En el resto de la nómina no sobresalieron en exceso los primeros ganadores, los Gajic. Tomovic, Aleksandrov (exjugador del Manresa en 2013, lastrado antes por una úlcera en la rodilla) y Kuznetsov. Tampoco Jogela, porque tras unos años en el Zalgiris su carrera no prosperó. Ulubay no salió de Turquía y fue campeón de la Eurocup en 2018 con el Galatasaray y, finalmente, Stefan Peno, ex del Barcelona, pasó por el Alba Berlín y Bilbao; Roko Prkacin, ex de la Cibona, está ahora en el Girona, y Antoine Diot es un ex del Valencia y Villeurbanne con amplia experiencia en la Euroliga y a nivel de selecciones.

Entre los canteranos del Unicaja nunca uno fue MVP de un torneo de selecciones. Francis Alonso estuvo en el quinteto ideal en el Europeo sub-20 de julio de 2016, en Helsinki que ganó con España precisamente en una final ante Lituania, y jugadores como Carlos Cabezas, Berni Rodríguez y Germán Gabriel, con muchos éxitos de selecciones, se vieron marcados por pertenecer a la mejor generación de jugadores españoles de la historia, la de 1980 (Navarro, Gasol o Raúl López, entre otros).

Álvaro Folgueiras, brillante en el último Mundial sub-17 en Málaga, Rubén Guerrero y Alberto Díaz han sido otros de los nombres destacados en los últimos lustros en las categorías inferiores de la selección española, pero Saint-Supery ha irrumpido con más fuerza.

1999: Aleksandar Gajic.

2001: Veljko Tomovic

2003: Nemanja Aleksandrov.

2004: Vitalij Kuznetsov.

2005: Antoine Diot.

2006: Ricky Rubio.

2007: Dejan Musli.

2008:Jonas Valanciunas.

2009: Tauras Jogela.

2010: Dario Saric.

2011: Mario Hezonja.

2012: Okben Ulubay.

2013: Stefan Peno.

2014: Killian Tillie.

2015: Dzanan Musa.

2016: Usman Garuba.

2017: Killian Hayes.

2018: Roko Prkacin.

2019: Rubén Domínguez.