Los aficionados no eran una prioridad para la FIBA esta temporada: «Queríamos mostrar nuestra tecnología», dice Comninos

Sorprendió la respuesta de Comninos, que deslizó que los conflictos que existen ahora en algunos puntos de la geografía europea, entiéndase en términos deportivos y no geográficos, condicionaron la decisión, en una clara alusión a Israel. El directivo dijo que esta temporada tenían claro que esta temporada el objetivo era disponer de un gran pabellón en el que instalar la pista de leds que tanto está dando que hablar.

«El pabellón no estaba lleno, es cierto. Había muchas decisiones por tomar y este año la prioridad estaba en elegir una sede que valorase esta tecnología. Llenar el pabellón es algo que sólo te lo garantiza jugar en una sede de un equipo anfitrión, pero si tenemos que esperar entonces ponemos en peligro la posibilidad de mostrar el mundo de lo que somos capaces. Si se ve en la televisión, se aprecia la apuesta que hemos hecho», dijo en una primera valoración algo incómodo con la pregunta de SUR.

Comninos continuó justificando la elección de Belgrado, cuando había otras ciudades dispuestas a acoger el torneo y de que los clubes, con tres equipos españoles con serias aspiraciones de llegar a la Final Four, apuntaron a Madrid como posible destino y de mucho mejor acceso. «Necesitábamos un pabellón que nos permitise mostrar esto y también que no estuviese influido por los problemas políticos. Además, encontramos la colaboración de la Federación y de la propia empresa que gestiona el Belgrado Arena. No es el número de aficionados que solemos tener, pero sólo tenemos ocho temporadas de vida... Sabemos que en el pasado teníamos más fans, pero este año teníamos que priorizar y mirar al futuro para romper barreras para demostrarle al mundo lo que podíamos hacer. La decisión no fue fácil, pero la decisión de venir a Belgrado ha sido acertada. No hay muchos eventos que vayan a una sede neutral. Sabíamos que el viaje desde España era complicado y agradecemos el esfuerzo que han hecho los aficionados. Esperemos que el domingo tengamos más público porque tenemos cuatro grandes equipos. Creo que tomamos la decisión correcta de venir y los aficionados locales vendrán el domingo. Tenemos dos de los mejores equipos de Europa jugando sobre esta pista que es única», defenció el CEO de la Champions.

Durante su amplia comparecencia, el directivo griego explicó que algunos clubes han pedido un cambio de formato, para así poder rentabilizar la inversión con la posibilidade de disputarse más partidos. Sin embargo, aunque se está discutiendo, la idea no es hacer cambios la próxima temporada, aunque si no es el próximo año, ya no sucederá ante la previsible fusión con la Eurocup dentro de dos campañas, algo a lo que también se refirió en Belgrado, el presidente de la FIBA en Europa, Jorge Garbajosa.

«Para la próxima temporada no cambiaremos. Lo hemos hablado con los clubes y hay algunos que quieren más partidos que les garanticen más ingresos, pero otros tienen una mayor exigencia en sus ligas, como en la ACB. Estos aprecian nuestro formato. Ellos pueden jugar bien en sus ligas porque nuestro sistema les ofrece un balance. Sí es algo que estamos explorando, porque contamos con los clubes, que valoran la calidad de lo que le ofrecemos. El formato les permite centrarse en estos pocos partidos», explicó.

Comninos no quiso mojarse demasiado en la negociación que hay abierta con la Euroliga sobre la fusión con la Eurocup antes expuesta. «Es verdad que estamos sentandos negociando y queremos seguir evolucionando. Hay un consenso de que algo necesita cambiar en el deporte que es el segundo en importancia en Europa. Este es el gran desafío. El interés de los clubes es ese, pero el mercado no responde así. Todo debe ser más claro y simple e incluso fácil para los participantes. Existe la posibilidad de unificar la Eurocup y la Champions, pero es un punto más de las negociaciones para mejorar el ecosistema del baloncesto europeo. Necesitamos tenerlo todo más claro, porque para nosotros lo más importante son los aficionados. El actual ecosistema con diferentes competiciones, sistemas de juego e incluso normas no es lo mejor. Hay muchas cuestiones todavía por resolver», finalizó