El Unicaja, dispuesto a consumar la gesta del ascenso
Con una plantilla más joven y física, el cuadro malagueño arrancará este domingo su segunda campaña en Liga Femenina 2 en el feudo del Paterna Proyecto Lázarus
marina rivas
Sábado, 10 de octubre 2020, 00:31

Se acabó el año de prueba, a partir de este domingo tocará volver a luchar para consumar la gesta, la de convertir el Unicaja ... en el meteórico proyecto rumbo a la élite nacional que comenzó a gestarse hace sólo tres temporadas. En la primera se quedó a las puertas de subir a su actual categoría, la Liga Femenina 2; en la segunda lo consiguió y en la tercera -la pasada- el equipo se consolidó en segunda división nacional y consiguió colarse entre los conjuntos que debieron haber peleado en la fase de ascenso a Liga 1. Oportunidad que imposibilitó la pandemia, que desembocó en subidas directas sin pasar por la cancha.
Este nuevo curso, la guía de este equipo seguirá siendo la misma que lo vio nacer, Lorena Aranda, aunque pocos nombres se mantienen en pie con respecto al combinado inicial, e incluso, en cuanto al grupo del pasado año. Pese a los numerosos movimientos, la técnica malagueña no duda en la posibilidades del conjunto, que arrancará su calendario este domingo a las 12.00 horas en el feudo del Paterna Proyecto Lázarus.
Los vestigios de la crisis generada por el coronavirus hicieron bastante mella en la pretemporada cajista, en la que sólo se contó con tres profesionales: la base y capitana Gema García, la ala-pívot Vero Matoso y una de las recién llegadas, la experimentada escolta procedente del Barça CBS, Salomé García. Además de las aleros Ana Jiménez y otra cara nueva, internacional en categorías inferiores y formada en el Andalucía Promesas, María Torreblanca; la base Marta Ortega y la ala-pívot Sofía Arcos, que este curso adquiere ficha con el primer equipo. «Creo que muchos de los equipos estamos en la misma situación, con el Covid ha costado un poco más incorporar a los fichajes por el tema de todo el papeleo de extranjería», lamenta Aranda.
Se refiere a los dos refuerzos internacionales de este año, además de una cara ya conocida en la entidad, la de la pívot montenegrina Ana Pocek. Esta última llegó en el tramo de la pasada campaña y resultó crucial, llegando a protagonizar varios 'dobles-dobles' en puntos y rebotes. En cuanto a las novedades, que se unieron al grupo esta misma semana, la entrenadora valora: «Taja (Cole, procedente de la Virginia Tech University) es un espectáculo, muy viva, muy alegre, muy vertical, sabe leer muy bien el juego, creo que nos va a divertir, y Nneka (Ezeigbo, de la Robert Morris University) es una jugadora muy fuerte dentro de la pintura, muy reboteadora, potente, buena en el 'uno contra uno'. Creo que las dos van a complementar muy bien el equipo». Esta última, todavía en trámites para oficializar su pasaporte cotonú y su 'transfer', deberá esperar para debutar.
Con las ya mencionadas quedaría una plantilla algo escasa de efectivos (diez), pero potente. «Creo que físicamente hemos dado un paso adelante, es un equipo más físico que el año pasado, pero tenemos que trabajar el que es más joven, entonces es normal que vivamos momentos de inexperiencia en ciertos partidos, dependerá de nosotros, de formar a las jóvenes y que las veteranas nos ayuden, porque las vamos a necesitar», afirma Aranda.
Aunque una de las claves del nuevo curso estará en saber explotar el talento de la casa, del que ya se sirvieron en pretemporada. «Tenemos la suerte de contar con un equipo júnior muy trabajado en Los Guindos y sin ellas no hubiéramos podido sacar la pretemporada adelante. Gracias a ellas, la hemos salvado», dice. Y concretamente se refiere a dos que, aunque con fichas en el conjunto júnior, serán caras habituales del primer equipo. Eva de Meyer (pívot) y Noemí Ugochukwu (alero), dos joyas de la casa, internacionales sub-16: «La cantera viene pisando fuerte y, con el trabajo que están haciendo, creo que es fundamental darles visibilidad».
Eso sí, sin dejar a un lado la formación, tienen claro que el objetivo es la competición porque, un año más, por proyecto y presupuesto, el Unicaja volverá a estar en el punto de mira. Lo secunda la entrenadora: «Por supuesto, yo creo que lo estamos siempre y se lo digo mucho a las jugadoras. Somos el Unicaja, aquí no vale que sea tu primer o segundo año. El Unicaja tiene una tradición, un nombre, y eso incita a que los rivales que jueguen contra nosotros den su 100% siempre, porque motiva jugar con un club con historia ACB. Nosotras siempre tenemos que buscar dar lo mejor de nosotras y tener el objetivo de aspirar a lo máximo».
Eso sí, sin pisar a nadie, porque ya con un año de bagaje en la categoría, sabe de sobra que cada rival puede complicarte un partido. Por supuesto, también el CAB Estepona, con el que compartirá Liga y sobre el que destaca sus grandes refuerzos. Más ambiciosa que nunca y con la lección aprendida sobre el traspié inicial del pasado curso, Aranda relata: «Ya tenemos algunas cosas aprendidas, el cuerpo técnico del año pasado no conocíamos la categoría, igual que muchas jugadoras, y pecas en las primeras jornadas, también empezamos con varias lesiones y te trastoca un poco todo. Pero trabajando llegaron los resultados. No será fácil, pero vamos a aspirar a lo más alto, por supuesto; seremos nosotras las que nos pongamos el límite».
La plantilla
Bases. Gema García, Marta Ortega y Taja Cole (procedente de la Virginia Tech University).
Escoltas. Salomé García (del Barça CBS).
Aleros. Ana Jiménez, María Torreblanca (del Baxi Ferrol) y Noemí Ugochukwu (con ficha en el júnior).
Ala-pívots. Sofía Arcos y Vero Matoso.
Pívots. Ana Pocek (montenegrina), Nneka Ezeigbo (de la Robert Morris University) y Eva de Meyer (con ficha en el júnior).
Cuerpo técnico. Lorena Aranda (entrenadora), Jesús Lázaro (técnico ayudante), Javier Pérez (tercer ayudante), Juan José Casado (delegado), José Sánchez-Cervi (preparador físico) y Alejandro Ballesteros (fisioterapeuta).
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