Andorra tiene la llave de la Eurocup

Así que Luis Casimiro tendrá que reordenar a su equipo para hacer frente a un rival que lo arrolló en la Liga no hace mucho y que en su cancha es muy sólido. El equipo malagueño, además, ha perdido sus tres últimos encuentros como visitante (Galatasaray, Trento y Tofas), pero ahora la situación es más exigente que antes. El Top-16 es una fase muy corta, sólo seis partidos, por lo que un triunfo a domicilio y amarrar los partidos de casa es sinónimo de clasificación. Por eso, el partido de esta tarde es tan importante.

Sobre el papel, la dinámica del Unicaja es buena, con esas dos victorias seguidas ante el Joventut y el Betis, en las que jugó un buen baloncesto y estuvo certero desde la línea de tres. Pero su irregular trayectoria de esta temporada no invita a confianzas.

Delante tendrá un complicado, que es cierto que no atraviesa un buen momento con tres derrotas en los últimos cuatro partidos, pero que como local es difícil de superar. Además, el Morabanc Andorra afronta el choque como una final después de haber perdido ante el Joventut y el Tofas en las dos primeras jornadas del Top-16, y antes de jugar en Málaga la próxima semana.

Las ausencias de Ejim y Elegar obligarán a Casimiro a utilizar a Deon Thompson como ‘cinco’, donde puede hacer daño por su capacidad para jugar lejos del aro, quién sabe si incluso también a Suárez. Lo que está claro es que la rotación interior se queda muy corta y quizá el club ponga un ojo en el mercado cara a un posible refuerzo. La semana pasada ya exploró alternativas y ahora las lesiones le pueden llevar a fichar.