Javier Gándara: «La Málaga tecnológica abrirá nuevas oportunidades y Easyjet estará ahí»

–Esta misma semana Easyjet anunciaba refuerzos para la base estacional de Málaga, que inauguraron en junio. ¿Qué balance hace del estreno de este centro de operaciones?

–Hemos inaugurado en pandemia, pero el estreno ha sido bastante bueno. Hemos cubierto las expectativas. Una de las cosas que nos ha permitido contar con esta base fue reaccionar cuando el Reino Unido siguió con las restricciones en el verano. Al disponer de este centro de operaciones pudimos desviar nuevas rutas con otros orígenes y traer tráfico de otros sitios, con lo que diversificamos el negocio. Abrimos cinco conexiones con países nórdicos que han funcionado muy bien. Ahora queremos seguir desarrollando el modelo contando el próximo verano con dos aviones nuevos en esta base.

–¿Qué supondrá la llegada de estos nuevos aviones?

–Pasamos de tres aviones, que es con lo que abrimos, a tener cinco. Además, cuando inauguramos ya contratamos a cien personas, fundamentalmente pilotos y tripulantes de cabina, y ahora vamos a contratar a sesenta más, todos ellos con acuerdos laborales locales.

–¿Estos refuerzos permitirán la apertura de nuevas rutas y quizá de nuevos destinos aún no explorados?

–Es una de las posibilidades y es eso lo que ahora vamos a analizar. De momento vamos a iniciar el proceso de reclutamiento del personal necesario y luego, de aquí a un par de meses, que será cuando cerremos la temporada de verano del 2022, veremos qué parte del crecimiento es para rutas existentes y qué proporción para nuevos destinos. Será una mezcla de las dos cosas lo que permitirá seguir creciendo.

–¿Cómo prevén cerrar este año en el aeropuerto de la Costa?

–Este verano ha sido algo raro, en el sentido de que el principal mercado de Málaga, que es Reino Unido, ha estado pues casi cerrado o muy restringido, por eso tuvimos que diversificar a otros destinos. Es cierto que muchas de esas rutas han funcionado muy bien, como las de los países nórdicos, que han tenido factores de ocupación del 80% o superiores y muy similares a los de antes de la pandemia, pero en cualquier caso estamos ante el comienzo de una incipiente recuperación.

–¿Qué efecto tendrá el anuncio de Reino Unido de levantar las restricciones para los vacunados el próximo día 4?

–Sin duda va a ayudar a que ya finalmente se reactive el tráfico con el Reino Unido. Esperamos poder tener un final de verano un poco más alargado y que en septiembre y en octubre se pueda intensificar el tráfico de británicos. Lo que está clarísimo es que la gente, en general, y los británicos, en particular, quieren venir a la Costa del Sol.

–¿Cree que aún se está a tiempo de recuperar esa parte de negocio británico perdido?

–Se recuperará una parte, pero pequeña, porque el grueso de la llegada de británicos es en los meses de julio y agosto y esos ya están perdidos. Algo sí que esperamos remontar, de forma que este 2021 sea el comienzo de la recuperación y que en 2022 se mantenga la tendencia. En cualquier caso es bastante probable que al menos hasta 2023 no se recuperen los tráficos previos a la pandemia.

–Por lo que comenta han rebajado los plazos de la recuperación de los indicadores de 2019...

–Sí. Antes hablábamos de que iba a ser de 2023 a 2024. Estamos ante una situación en la que es muy complicado hacer previsiones incluso a medio plazo, pero los índices de vacunación pueden hacer que se acelere esta recuperación a 2023. Aún así todo es muy incierto. Queda mucho partido por jugar.

–La temporada baja para las aerolíneas comienza a final de octubre. ¿Qué proyectos tiene Easyjet para el aeropuerto de Málaga?

–En la temporada de invierno baja la demanda, sobre todo la del tráfico que nosotros hacemos, que es la de turismo europeo y que es muy estacional. A final de octubre esperamos hacer el cierre de invierno de la base, para volver a reabrirla en abril, pero mantendremos una serie de vuelos desde otros centros de operaciones para Málaga.

–En la inauguración de la base destacó la importancia del impulso de esa Málaga tecnológica que se está configurando. ¿Abre nuevas oportunidades en cuanto a un nuevo perfil de viajero o a nuevos destinos?

–Aunque el cliente vacacional tiene un peso prioritario, también hay una parte, que en el caso de Málaga tiene mucha importancia, que es la del que tiene una segunda residencia en la Costa, pero tampoco podemos olvidar al cliente de negocios. En el cómputo total de nuestra red está un poco por debajo del 20%, que es bastante significativo. En destinos como Málaga no es tan alto, pero puede ser una oportunidad real de desarrollar ese mercado con el auge de ese polo tecnológico que se está creando. Ello permite, precisamente, tener la combinación ideal de tráfico vacacional, residencial y de negocios. La Málaga tecnológica abrirá nuevas oportunidades y nosotros estaremos ahí para aprovecharlas.

–¿Puede este impulso abrir nuevas rutas más allá de las habituales de la compañía?

–No tenemos ahora mismo dentro de nuestra estrategia hacer vuelos de largo radio. Nuestra aspiración es conectar Málaga con el resto de destinos europeos, que es lo que vamos a seguir haciendo. Volar fuera de Europa no lo contemplamos.

–¿Cómo se ha recuperado el tráfico aéreo en la Costa?

–Estamos hablando aún de índices de recuperación muy limitados. Cuando nos referimos al número de vuelos el ritmo de reactivación es mayor, en torno al 70%, pero si atendemos al volumen de pasajeros todavía estamos en niveles bajos, alrededor del 40%.

–¿Qué supone Málaga para Easyjet?

–Málaga es uno de los primeros aeropuertos en los que empezamos a volar fuera del Reino Unido. Llevamos volando desde 1998. Costa del Sol es un destino muy querido por nosotros y por nuestros pasajeros y lo queremos con apuestas como la de abrir este verano la base y con la de reforzarla para la próxima temporada alta para tener más presencia y conectar Málaga con el resto de Europa de forma fácil y asequible. para todos los bolsillos.