Taleb Rifai: «Málaga es un referente en diversidad turística, pero también en aportar autenticidad»

A punto de dar comienzo el acto de bienvenida a los 250 participantes en el 103 Consejo Consultivo de la Organización Mundial del Turismo (OMT), Taleb Rifai, secretario general de este organismo de la ONU, destaca el potencial de la ciudad de Málaga como un referente de diversidad y autenticidad, analiza el prometedor futuro de la industria turística mundial, que moverá 1.800 viajeros en 2030, y reivindica, ante la eclosión y auge de diferentes turísticos, el tirón del turismo de sol y playa.

-La OMT ha elegido Málaga para celebrar su 103 Consejo Ejecutivo. Esta ciudad ha estado siempre a la sombra de la marca Costa del Sol. ¿La decisión viene a ser una declaración oficial de que la capital malagueña es ya un destino turístico por sí mismo?

-La ciudad de Málaga es un destino consolidado y maduro que ha sabido actualizarse diversificando la tradicional oferta de sol y playa, adaptándose a un viajero cada vez más exigente. El turismo gastronómico, cultural, de conferencias, de deporte y aventura e incluso de salud constituyen en la actualidad segmentos diferenciados hacia los que el turista cada vez tiene más predilección y que inciden en la decisión de elegir uno u otro destino. Creemos que la ciudad de Málaga es un referente en esta diversificación pero también en aportar autenticidad, otra de las estrategias que enfatizamos en la promoción de destinos.

-¿Qué supondrá para esta ciudad la celebración de este evento?

-Málaga acoge estos días no sólo el Consejo Ejecutivo de la Organización Mundial del Turismo, una reunión esencial en la operatividad de nuestra organización, pues debatimos tanto el plan de trabajo como las decisiones más relevantes. También acoge los Juegos Interagencia de Naciones Unidas, unas pruebas deportivas que reúnen a las distintas agencias, programas y fondos del sistema que trabajan en distintas áreas y zonas del mundo. Estos dos eventos posicionan a Málaga como lugar de encuentro y de debate, pero también como un destino que facilita este tipo de actos.

-El turismo de la Costa del Sol y de Andalucía encara una temporada alta que se convierte en una verdadera oportunidad para dar un gran salto en el escenario internacional, ante la inestabilidad de fuertes competidores. ¿Qué consejo daría al sector para no dejar pasar este tren?

-Además de la diversificación hacia los segmentos turísticos y de la autenticidad que deben mantener los destinos, existen multitud de estrategias de promoción. El trabajo continuado y en cooperación con todos los agentes que trabajan en el sector turístico, de naturaleza pública y privada, la innovación en la oferta del destino, la diferenciación y la excelencia se perfilan como las claves en la fase de consolidación y maduración.

-¿Y qué es lo que el viajero no perdonará?

-El acceso a la información, las nuevas tecnologías o la concienciación de los viajeros hacia temas como la sostenibilidad o la preservación del patrimonio son temáticas muy vinculadas al desarrollo que ha tenido el sector del turismo en las últimas décadas. Por tanto el viajero conoce más que nunca sus obligaciones pero también sus derechos y siente que su viaje debe tener un valor añadido.

-En general el turismo atraviesa por un momento dulce. ¿Cuáles son las claves que propician este auge?

-Es cierto que la información relativa al sector tiene ahora una mayor difusión, alcance e impacto, pero realmente el turismo ha tenido un comportamiento alcista en las últimas décadas. Este crecimiento no es un fenómeno reciente, sino una constante reflejada por las cifras. El turismo es una industria que ha pasado de tener 25 millones de desplazamientos internacionales en 1950 a más de 1.100 en la actualidad, y que genera uno de cada once empleos. Según las previsiones de la Organización Mundial del Turismo llegaremos a 1.800 millones de turistas internacionales en el año 2030, lo que indica la fortaleza del sector.

-Las nuevas tecnologías han transformado esta industria. ¿Hacia dónde va el sector?

-En la actualidad las nuevas tecnologías facilitan todo el proceso del viaje, desde la decisión sobre el destino hasta la llegada y disfrute del mismo. La tendencia habla de un mayor protagonismo, si cabe, de las nuevas tecnologías en asuntos como la facilitación de los visados o en mejorar la seguridad de todos.

-Lo cierto es que se ha pasado del control de los grandes touroperadores al empoderamiento del viajero. ¿Cómo afecta a la industria y qué deben hacer sectores como el hotelero o las agencias de viajes ante la supremacía del turista?

-La industria, como ocurre en otros sectores, debe adaptarse a las tendencias y a los cambios que experimenta el consumidor. Esto implica que los gustos, hábitos o cultura del viajero deben ser tomados en cuenta por los actores del sector. Lo cierto es que la concienciación del sector respecto a la evolución que está experimentando el mismo es evidente. En este sentido, la formación y la capacitación continuada son la clave para poder alcanzar los niveles de excelencia que merece el viajero.

-¿Es el momento de rescatar intangibles como la hospitalidad y la amabilidad?

-No creo que deban ser rescatados puesto que nunca han dejado de estar vigentes. Es más, el viajero considera estos aspectos algo vital en su experiencia y de hecho así se constata en la valoración de destinos.

-¿Qué se avecina en el contexto internacional para el turismo? ¿Se espera pronto la vuelta al mercado con la misma fuerza de siempre de Turquía, Egipto o Túnez?

-Estos países son destinos consolidados y maduros que han sufrido trágicos eventos con terribles consecuencias en todos los sectores de su economía. El turismo no es algo aislado, sino transversal, y por tanto también se ve afectado ante este tipo de actos. Aun así, es necesario enfatizar que el turismo es uno de los sectores más resistentes y con mayor capacidad de recuperación. Puede que se aprecien signos de paralización del sector a corto plazo, pero éstos tienen un menor impacto que en otros sectores tras un cierto período de tiempo.

-¿Considera oportuno que el nuevo Ejecutivo contara con un Ministerio exclusivo de Turismo?

-Junto con la diversificación y la autenticidad de un destino, el apoyo institucional es el tercer pilar necesario para que el sector pueda ser consolidado. Tener un Ministerio de Turismo o una agencia especializada dedicada a promover y a invertir en el sector generalmente ayuda a reforzar el turismo y por tanto sería una buena noticia para la Organización Mundial del Turismo.

-¿Cómo ve el futuro más próximo de la Costa del Sol y de Andalucía? ¿Cuáles cree que son las claves del éxito de estos destinos que registran cifras históricas?

-La diversificación que está desarrollando la región hacia segmentos como el turismo cultural, de aventura o incluso de salud es muy notable y explica que los visitantes crezcan cada año. Al mismo tiempo, encuentro necesario no menospreciar el turismo de sol y playa, pues es una alternativa tan válida como cualquier otra. La aplicación de enfoques sostenibles y de desestacionalización es necesaria y útil, pues ayudará a seguir consolidando el turismo en esta región, ya convertida en un referente internacional.