«WhatsApp actualiza condiciones y política de privacidad». ¿Aceptar? Por qué no te afectan estos cambios

Polémica sí, pero sorpresa poca. Hay muchos datos que, para el mercado publicitario, son muy jugosos. Facebook, propietaria de WhatsApp, pretende monetizar cuanto antes su plataforma permitiendo a los anunciantes ponerse en contacto con sus clientes a través de la app, o incluso vender directamente en la aplicación sus productos.

Según la empresa, los datos que pueden ser compartidos entre Whatsapp y el resto de aplicaciones de Facebook (incluyendo Instagram y Messenger) incluyen los contactos y la información del perfil de usuario, pero nunca el contenido de los mensajes, que sigue estado cifrado de extremo a extremo.

Facebook se defiende: «La actualización de las políticas de confidencialidad son habituales en la industria y estamos proporcionando a los usuarios todas las informaciones necesarias para verificar los cambios que entrarán en vigor el 8 de febrero«, indica un portavoz del grupo en AFP. Lo importante es no aceptar sin leer.

Pero llama la atención, si se leen estas nuevas condiciones y política de privacidad, que quedan sin efecto en países de la UE y del Reino Unido. Gracias a la existencia del Reglamento General de Protección de Datos (RGPD), WhatsApp y Facebook no pueden acceder de manera cruzada a sus datos. Por tanto, expresamente no hay cambios en las prácticas de intercambio de datos en el viejo continente que surjan de los Términos de servicio y la Política de privacidad actualizados. Eso sí, con la firma del consentimiento se accede a que los datos se utilicen para desarrollar nuevas funcionalidades ofrecidas a través de WhatsApp Business.

Siempre hay un gran beneficiado de toda polémica. En este caso la aplicación Telegram, que afirma haber batido récords de inscripciones pocas horas después de la polémica destada en WhatsApp. Unos 25 millones de usuarios se han inscrito en la plataforma de mensajería Telegram solo 72 horas, afirms su fundador, el ruso Pável Dúrov. «Durante la primera semana de enero, Telegram superó los 500 millones de usuarios mensuales activos. Por cierto: si cambian a una nueva red social, recuerden también leer sus condiciones de uso y política de privacidad. Nadie regala nada.