Instagram podrá seguir usando tus fotos para entrenar su IA aunque te des de baja

La buena noticia es que hay una forma de negarse a que la plataforma utilice nuestras fotos para ello, aunque es un proceso un tanto tedioso con varios pasos que terminan con un correo a Meta explicando las razones por las que el usuario quiere declinar este punto y que la compañía puede aceptar o rechazar. Sin embargo, no será la solución definitiva.

La propia plataforma reconoce en su política de privacidad que podría «seguir procesando información sobre ti para desarrollar y mejorar la IA de Meta aunque te opongas o no uses nuestros productos». Esto significa que la compañía da por hecho que podrá almacenar y utilizar las fotos de sus usuarios aunque se den de baja del servicio o declinen la nueva política de privacidad. Ocurrirá en los casos en los que la información o imágenes hayan sido compartidas por otro usuario que siga usando las plataformas o, simplemente se mencione al usuario en una publicación o un pie de foto de otro, explica Meta.

Los expertos consultados sobre la legalidad de este caso aseguran que con consentimiento expreso del usuario se puede hacer uso de la información que voluntariamente se aporte. Senén Barro, director de Citius, el Centro de Investigación de en Tecnologías Inteligentes de la Universidad de Santiago de Compostela indica que «salvo que la ley o nosotros mismo lo evitemos, las empresas harán uso de los datos para todos los objetivos de negocio que consideren oportuno, no hay que tener ninguna duda, ya llevan tiempo haciéndolo y con bastante impunidad».

¿Por qué necesita Meta nuestras fotos? El sistema de IA que anunció el CEO de Meta, Mark Zuckerberg, a principios de año necesita una cantidad ingente de datos para entrenar la máquina y poder comenzar a operar, como cualquiera de estos servicios. En su centro de privacidad, el gigante señala que necesitan una «enorme cantidad de datos» para entrenar modelos «eficaces», por lo que usan «distintos orígenes, como información pública en internet, información cedida bajo licencia o la información que compartes en los productos de Meta». Sobre esto, detallan que la información que recogen de sus usuarios son publicaciones, fotos y pies de fotos, pero que no usan el contenido de los mensajes privados para alimentar su IA.

Por ello, el usuario puede negarse a ceder esta información o incluso darse de baja de las plataformas, pero las compañías de este tipo tienen una «intención manifiesta» de dificultar este proceso al usuario para que se olviden de hacerlo. «Esto no debería consentirse pero es difícil limitarlo, ya que usan muchas argucias», señala Barro, que explica que estos gigantes de internet se aprovechan de que los usuarios no quieren dejar estas redes sociales para utilizar sus datos.

Los servicios de Meta afectados por esta actualización son Facebook, Instagram y Messenger, mientras que Whatsapp queda excluido, al menos por el momento. En su blog, la compañía asegura que los mensajes personales con amigos y familiares son «inaccesibles». Es decir, la IA puede leer lo que se envía al sistema, pero los mensajes personales aparecen cifrados de extremo a extremo y «nadie más, ni siquiera Meta, puede verlos».

En el futuro, la compañía anuncia que crearán chats con la IA, pero «visualmente diferentes» para que se puedan distinguir con facilidad de los mensajes personales. Y para iniciar una conversación habrá que realizar una acción como abrir un chat: «Solo tú o un participante del grupo puede iniciarlo, ni Meta ni Whatsapp pueden hacerlo», confirma la compañía.