Mari Ángeles, una mujer luchadora criada en el corazón de El Bulto

Juan Cano y Alvaro Frías

Málaga

Viernes, 16 de julio 2021, 01:17 | Actualizado 11:43h.

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Sentados al fresco para huir del calor del verano, en la puerta del bloque en el que viven, los vecinos de Mari Ángeles se fueron enterando de que su expareja acababa de asesinarla solo una calle más arriba. Recibían la noticia rotos por el «tremendo» cariño que le tenían a la mujer, esa misma que habían visto crecer corriendo por las callejuelas de El Bulto.

Mari Ángeles nació hace 46 años en la capital. Se crió en la barriada malagueña, en las antiguas corralonas que había en la calle Donoso Cortés. «Sus padres, sus abuelos, todos son de aquí. Cuando echaron abajo las casas se marchó, como todos nosotros, pero después regresó y siguió viviendo en las Viviendas de Protección Oficial que se construyeron», cuenta una de las vecinas de la mujer asesinada.

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No vivía sola. Lo hacía en un piso de la cuarta planta junto a su hijo menor, de 18 años, mientras que su hija mayor, ambos fruto de una relación anterior, se había mudado a una vivienda situada en la segunda. Allí hacían su vida, en el corazón de El Bulto, el barrio que la vio crecer.

Mari Ángeles, una mujer luchadora y buena, como la definen todos los que la conocían, llevaba trabajando 15 años en el colegio San Manuel, según explica uno de sus compañeros. Allí se dedicaba a tareas de limpieza y de cocina en la comunidad de las Hijas de la Caridad del centro escolar. Sus compañeros recuerdan su incombustible alegría.

No tuvo suerte en su relación anterior. Mari Ángeles denunció a su exmarido por maltratarla. De hecho, la mujer figuraba en el Sistema de Seguimiento Integral en los casos de Violencia de Género (VioGén), aunque actualmente ya no estaba activa.

Mari Ángeles logró pasar página, pero entonces conoció a Jose. Los vecinos de su bloque insisten en que nunca escucharon discusiones en la vivienda, pero a sus compañeros de trabajo el hombre no les daba buena espina. Alguno incluso asegura que los vio pelear acaloradamente en la calle. Ayer la asesinó.