

Secciones
Servicios
Destacamos
Había transformado el piso en el que reside en el Centro de Málaga en una especie de bar de copas, en el que servía bebidas alcohólicas a todo aquel que quisiera burlar las medidas impuestas por la Junta de Andalucía para luchar contra la pandemia del coronavirus y continuar la fiesta entre las seis y las ocho de la tarde. Así aseguran las fuentes consultadas que actuaba una joven, a la que los agentes de la Policía Local de Málaga han sorprendido durante esta actividad y la han denunciado.
Los hechos tuvieron lugar este pasado fin de semana. El sábado 26 de diciembre, sobre las 18.30 horas, la Sala del 092 recibió varias llamadas en las que se informaba de que estaba celebrando una fiesta con numerosas personas en un piso situado en la Plaza del Teatro.
Agentes vestidos de paisano acudieron a la zona y observaron en el portal a varias personas llamando al mismo piso, así como a otras que hablaban por el teléfono móvil y pedían que les abrieran la puerta. Una vez dentro del edificio se cruzaron con otras que bebían en unas escaleras, no llevaban mascarilla.
Cuando los policías locales llegaron a la casa tocaron al timbre. Enseguida les abrieron la puerta. Era un chico, que no les preguntó a dónde iban ni quienes eran, así que ellos se quedaron sin atravesar el umbral a la espera de que alguien les diera permiso para entrar.
Desde la puerta, los agentes sacaron sus placas y se identificaron, pero allí nadie conocía a la propietaria del piso. No tardó en delatarse. Solo unos instantes después, siempre según las mismas fuentes, se dirigió a ellos sin saber que eran agentes y les dijo que pasaran y cerrasen la puerta para que la policía no detectara la fiesta.
Era demasiado tarde. Los policías locales le mostraron su placa, mientras la joven, italiana de 28 años, les contaba que sus compañeros de piso no estaban y que ella había invitado a varias personas para que bebieran en su casa.
Sin embargo, las personas que había en la casa no le siguieron la corriente. Las fuentes consultadas han informado de que aseguraron no conocer a la joven italiana y admitieron que las bebidas las habían comprado en el interior del piso, en una barra que se había habilitado. Por todo ello, se pidió a la chica que desalojara la casa y los agentes sancionaron a las 26 personas que había en ella por incumplir las medidas de prevención del coronavirus.
Tras ello, con el permiso de la joven, los policías accedieron a la vivienda. Observaron que había vitrinas repletas de botellas de alcohol. También localizaron esa mesa que se usaba como barra, en la que se servían las copas y en la que había una zona de cobro. Además, de por no cumplir con las reestricciones establecidas por la pandemia, la chica también fue sancionada al no tener licencia de explotación de hostelería y ser un negocio clandestino.
Hay que recordar que entre las 18.00 y las 20.00 horas, los bares tienen que cerrar. Fue en este intervalo de tiempo donde se detectó a esta joven, que aprovechaba la hora de cierre de los establecimientos de hostelería para ofrecer su casa como un local clandestino, según han explicado las mismas fuentes.
Publicidad
Publicidad
Te puede interesar
Encuentran a una mujer de 79 años muerta desde hacía varios días en su domicilio
El Norte de Castilla
Publicidad
Publicidad
Recomendaciones para ti
Favoritos de los suscriptores
Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.
Reporta un error en esta noticia
Comentar es una ventaja exclusiva para suscriptores
¿Ya eres suscriptor?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.