Hallan muerto con un disparo en la cabeza a un senderista de 21 años en un paraje natural de Málaga

Su cuerpo fue encontrado por la mañana, como confirmaron desde la Comisaría Provincial, con «signos de violencia» y una «herida de gran tamaño» en la cabeza, que al parecer fue causada por el impacto de la bala de un arma de fuego.

Precisamente, la familia del joven había denunciado su desaparición la tarde anterior, la del lunes 29 de agosto. De hecho, fueron sus propios familiares quienes localizaron el automóvil del chico en una zona aislada de ese mismo paraje cuando realizaban una batida para tratar de encontrarlo. Posteriormente se acabó hallando a la víctima sin vida.

Según pudo saber este periódico, las primeras pesquisas apuntarían a que la bala con la que se efectuó la detonación se correspondería con la de una escopeta de caza, aunque este punto no fue confirmado por la Comisaría Provincial, desde la que han precisado que, tras el hallazgo, se ha abierto una investigación para esclarecer las circunstancias de la muerte del joven, «presuntamente violenta».

Varias dotaciones del Cuerpo de la Policía Nacional se trasladaron durante la mañana al lugar en el que fue encontrado el cuerpo del joven, concretamente en la parte baja del Guadalmedina, interviniendo en dicho despliegue agentes pertenecientes a la Policía Científica y la Policía Judicial para recabar pruebas e indicios que ayuden al desarrollo de la investigación.

Tras el levantamiento del cadáver, se ha procedido a su traslado hasta las dependencias del Instituto de Medicina Legal (IML) de Málaga, situada en los bajos de la Ciudad de la Justicia, donde se le realizará la autopsia.