Arrestan a 32 personas en Málaga en una trama que simulaba accidentes de tráfico para cobrar el seguro

La investigación, bautizada con el nombre de 'operación Posto' y a cargo del Grupo I de Delitos Económicos de la UDEF/UDEV de la Policía Judicial de Málaga, se inició a partir de la denuncia de una agencia de detectives que representaba los intereses de las aseguradoras perjudicadas, las cuales habían detectado varios partes amistosos de accidentes con apariencia de ilicitud.

Las pesquisas se centraron en torno a siete accidentes simulados en un periodo de ocho meses. Los esfuerzos de los investigadores se centraron en esclarecer un fraude continuado por un cúmulo de accidentes de tráfico ocurridos con regularidad donde estaban implicadas personas del mismo entorno familiar, de amistad o vecindad, quienes actuaban de forma organizada a la hora de fingir los siniestros para obtener importantes ingresos por las indemnizaciones de las compañías aseguradoras.

En esta modalidad de supuesta estafa se daba, por una parte, un fraude consciente directo a manos de los principales organizadores del entramado delictivo, que elegían a los participantes en los falsos accidentes y se encargaban de toda la burocracia fraudulenta. Y, de otro lado, un fraude indirecto, ejecutado por otros miembros de la red que, conocedores de la trama y de forma voluntaria, se prestaban a participar en los siniestros simulados, recibiendo un tanto por ciento pactado de antemano.

En ambas variantes también existía la falsedad documental, ya que se confeccionaron documentos europeos normalizados de declaración amistosa de accidente en relación con siniestros inexistentes para dotarlos de una aparente veracidad.

Debido al alcance y complejidad de la investigación, al tratarse de una estafa masiva y continuada, se solicitó a la autoridad judicial autorización para acceder a los movimientos de las cuentas bancarias de los sospechosos, observándose las transacciones entre dichas cuentas del dinero cobrado en concepto de indemnización, así como el reparto escalonado de los ingresos obtenidos ilícitamente.

Paralelamente, la Policía Nacional sometía a los investigados a vigilancias discretas para establecer sus hábitos y contactos entre ellos, y se analizaba la documentación relativa a los accidentes de circulación investigados, concluyéndose que se trataba de un fraude profesionalizado, según la Comisaría Provincial.

Los investigadores apreciaron que los principales implicados iban ganando «cierta confianza» en la actividad criminal, ya que empezaron a implicar en los accidentes a personas de un círculo más lejano, evitando aparecer continuamente en primera línea de los siniestros y pasando a un segundo plano si tenían la posibilidad.

Existe un precedente similar en el año 2021, cuando la Policía Nacional, en colaboración con la Policía Local, arrestó a 17 personas detenidas de entre 18 y 58 años que presuntamente integraban una red similar

En aquella ocasión, el importe total de lo estafado ascendió a 17.000 euros, con tres empresas de seguros afectadas. Según las indagaciones realizadas entonces, los implicados en los siniestros simulaban aparatosos accidentes y confeccionaban partes amistosos, sin mediación de Policía Local ni presencia de testigos.

En la operación de 2021, las pesquisas se centraron en torno a un grupo de personas implicadas en accidentes en circunstancias sospechosas: lesiones no compatibles con los siniestros, ausencia de testigo de los hechos, numerosos afectados, lugares poco concurridos -polígonos industriales- y días festivos.