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Una anciana pulsa el botón de teleasistencia y espanta al ladrón que la tenía maniatada en su casa en El Limonar

Una anciana pulsa el botón de teleasistencia y espanta al ladrón que la tenía maniatada en su casa en El Limonar

El asaltante trepó por la fachada del edificio para acceder a la vivienda, en una segunda planta, e inmovilizó a la mujer con el cordón de su bata

Miércoles, 23 de marzo 2022

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El Servicio de Teleasistencia de la Junta acaba de cumplir 20 años y atiende ya a 245.235 beneficiarios en Andalucía. El botón rojo, que pende como si fuera un collar del cuello de sus usuarios, es un asidero a la vida para mayores, dependientes y personas con discapacidad, que con sólo pulsarlo pueden avisar en tiempo real a sus teleoperadores de que se encuentran mal o han sufrido un accidente doméstico.

Esta semana, una anciana que reside en el barrio del Limonar, en Málaga capital, le ha dado una nueva utilidad: el botón rojo sirvió también como botón del pánico durante el atraco que estaba sufriendo. Al pulsarlo, logró espantar al ladrón que la tenía maniatada y que se había colado en su domicilio tras escalar dos plantas por la fachada.

Los hechos, que ahora investiga la Policía Nacional, sucedieron en torno a las cuatro de la madrugada del lunes al martes. La mujer, de 87 años, dormía tranquilamente en su habitación cuando se vio sorprendida por un ladrón que ocultaba su rostro con un gorro y una mascarilla quirúrgica. Al parecer, para inmovilizarla, la maniató utilizando el propio cordón de su bata.

El asaltante empezó a registrar la vivienda en busca de dinero y joyas. Apenas le había dado tiempo a sustraer una pequeña suma en efectivo cuando una voz rompió el silencio y se dirigió a la anciana por su nombre de pila: «¿Está usted bien?». La pregunta procedía de la consola del Servicio de Teleasistencia. Pero el ladrón no lo sabía. La mujer, como pudo, logró pulsar el botón rojo y activar la emergencia.

El asaltante, al saberse descubierto, emprendió la huida utilizando el mismo camino que había empleado para acceder a la vivienda: salió por la puerta corredera de la terraza y se descolgó por la fachada -desde una segunda planta- que, sumando los soportales, puede tener cerca de 15 metros de altura.

Para entrar, el ladrón habría tenido que colocar de pie, en posición vertical, unos bancos de madera que hay en la entrada del edificio, que probablemente utilizó a modo de escalera, según relataron las fuentes consultadas. Desde ahí, se encaramó a una cornisa del bloque y fue escalando -cual Spiderman- por la fachada hasta llegar al segundo.

Ahora, las brigadas de Policía Judicial y Científica de la Comisaría Provincial investigan los hechos para tratar de identificar al autor del robo.

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