Multa de 200 euros por usar mal el parasol del coche: la advertencia de la DGT este verano
Muchos conductores lo usan para protegerse del sol, pero si no los retiras al conducir, la multa puede ser elevada
Con la llegada del verano y el aumento de las temperaturas, muchos conductores recurren a los clásicos parasoles para evitar que el interior del vehículo ... se convierta en un horno. Aunque a primera vista parezca un gesto inofensivo, la Dirección General de Tráfico (DGT) ha advertido que el uso indebido de ciertos tipos de parasoles durante la circulación puede acarrear sanciones de hasta 200 euros.
Esta advertencia afecta, sobre todo, a los modelos que se instalan de forma permanente o semipermanente en el parabrisas o las ventanillas, como los de tipo estor enrollable o aquellos que se adhieren con ventosas y permanecen colocados mientras el coche está en marcha.
El reglamento de circulación exige que el conductor mantenga siempre una visibilidad clara y sin obstáculos a través de todas las lunas del vehículo. Por ello, cualquier elemento que dificulte la visión frontal o lateral puede ser motivo de denuncia, incluso si su finalidad es mitigar los efectos del calor. La DGT recuerda que sólo están autorizados ciertos adhesivos homologados, como el distintivo ambiental o la pegatina de la ITV, y que el resto de objetos en los cristales pueden suponer una infracción si comprometen la seguridad.
Los parasoles que se colocan de manera puntual -como los tradicionales de espuma o material reflectante que se pliegan y retiran manualmente antes de iniciar la marcha- no suponen ningún problema legal. El conflicto surge cuando el conductor arranca con el parasol aún puesto o si el accesorio instalado permanece sujeto mientras se conduce, aunque no esté extendido en ese momento. El simple hecho de tener soportes fijos que alteren la visibilidad ya puede interpretarse como una infracción.
Aunque estas multas no implican la retirada de puntos del carnet, sí pueden alcanzar los 200 euros si el agente considera que se ha vulnerado la normativa que regula el campo de visión del conductor. Por eso, se recomienda extremar la precaución y evitar circular con cualquier elemento adicional que pueda reducir la visibilidad, especialmente en el parabrisas o las ventanas delanteras.
En pleno verano, cuando el uso de parasoles se generaliza, conviene recordar que protegerse del calor es compatible con cumplir la ley. La solución más segura sigue siendo utilizar modelos portátiles y retirarlos siempre antes de arrancar el motor. Un gesto sencillo que, además de evitar una multa, puede evitar accidentes.
¿Tienes una suscripción? Inicia sesión
