San Lázaro, Tribuna de los Pobres por un día
Largas colas para ver al Nazareno de los Pasos en el Monte Calvario y la Virgen del Rocío en su sede canónica
Uno de los momentos más especiales de la Semana Santa malagueña se vive cada Martes Santo al paso de la Cofradía del Rocío por la ... Tribuna de los Pobres, donde las emociones se desbordan en forma de piropos, aplausos y pulsos en una conjunción perfecta entre los tronos y el público que abarrota este singular espacio cofrade. En este atípico Martes Santo de pandemia, San Lázaro, el templo donde reciben culto el Nazareno de los Pasos en el Monte Calvario y la Novia de Málaga, se ha convertido en una particular Tribuna de los Pobres donde los fieles han renovado esa historia de amor y devoción con Jesús Caído y la Virgen de blanca pureza ataviada.
Durante el día, especialmente por la tarde, se han producido largas colas en San Lázaro y prolongadas por calle Ferrándiz hasta Barcenillas, de malagueños que han tenido que esperar casi hora y media para poder contemplar de cerca a las imágenes. En una capilla en la que se han retirado los bancos, el Nazareno se encuentra en el centro del templo sobre un monte de corchos exornado con flores silvestres y espinas, mientras que la Virgen del Rocío preside el altar mayor primorosamente ataviada y reluciente, con un adorno de flores blancas, una media luna a sus pies, donde también se encuentra el frontal del trono con las tres nuevas cartelas.
A la tres de la tarde, la hora en que el cortejo se debería puesto en marcha, en el interior de la iglesia de San Lázaro hubo una celebración de la palabra y a renglón seguido, en la cercana plaza del Jardín de los Monos, la Escuela de Música del Rocío interpretó dos marchas procesionales.
A lo largo de la tarde fueron numerosas las visitas de autoridades, entre ellas las del alcalde de la capital, Francisco de la Torre, y una representación del Ayuntamiento de Fuengirola para conmemorar el medio siglo de su nombramiento como hermano mayor honorario de la corporación victoriana.
Una popular hermandad que este año cambió la ofrenda floral de 'Un clavel para el Rocío' por la recogida de alimentos para entregar a colectivos sociales como Cáritas, y que ha sido todo un éxito ya que se superaron los 4.000 kilos. Un ejemplo de solidaridad.
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