Sarah Almagro: «¿Se han parado a pensar que gracias a mi caso vuestros hijos y nietos nunca van a sufrir las consecuencias de esta enfermedad?»
La deportista, que sufre las consecuencias de una meningitis meningocócica, recibe el galardón de Malagueña del Año y lo celebra con un discurso reivindicativo al que el público respondió con aplausos de emoción
CRISTINA PINTO
Jueves, 15 de diciembre 2022
«Hoy vamos a premiar a una superheroína», anunciaba el director de SUR, Manolo Castillo, al inaugurar la gala de Premios Malagueños del Año. Pues ... cuando llegó el momento de reconocer a esa «superheroína» con el galardón en el apartado de Sociedad el salón del Palacio de Ferias y Congresos se inundó de un largo aplauso para recibir a Sarah Almagro, que con 18 años sufrió una meningitis meningocócica, con sepsis y shock multiorgánico. Eso le hizo estar diez días en coma y someterse a 25 operaciones, incluyendo injertos y un trasplante de riñón. Junto a su familia peleó para conseguir que la vacuna tetravalente se incluyese en el calendario vacunal y que la sanidad pública financie prótesis funcionales para amputados. Ahora, a sus 22 años es bicampeona de España, subcampeona del mundo de surf adaptado y acaba de llegar hace unos días de alzarse con la medalla de bronce del Campeonato de Surf Adaptado. «Acabo de aterrizar hace dos días y aún estoy con el 'jet lag'», introducía la joven al recibir el premio de manos de la periodista de SUR Ana Pérez Bryan.
Y enseguida comenzó un discurso que empezó siendo emotivo y acabó siendo reivindicativo. Recordó a su abuelo, Julio Almagro, al que también recordaron en su discurso el director de SUR, Manolo Castillo, y el alcalde de la ciudad, Francisco de la Torre. «Recibir este reconocimiento es muy especial porque, aunque no tuve la oportunidad de conocerlo, muchos sí que lo conocisteis y ser la nieta de Julio Almagro es toda una responsabilidad porque era una persona maravillosa y amante de la profesión», dedicaba Sarah Almagro a su abuelo.
«Gracias Sur porque no dudasteis en alzar la voz por nuestra lucha», agradecía la malagueña. Y ahora era ella la que alzaba la voz para crear conciencia y hacer pensar al público asistente a esta gala: «Esto va para las personalidades aquí presentes y para las administraciones: ¿Se han parado a pensar que gracias a mi caso vuestros hijos y nietos nunca van a sufrir las consecuencias de esta enfermedad que yo he sufrido?», un largo aplauso respondía a esa pregunta.
Y Sarah Almagro seguía en su discurso: «¿Se han parado a pensar que si alguno de ustedes o sus seres queridos sufriesen esa enfermedad tendrían más fácil la vida gracias a mi caso? Pensaba que las administraciones trabajaban para los ciudadanos, pero después de esto...», puntualizaba. Y culminaba su discurso reivindicativo con la petición de un centro de referencia para amputados: «No hay nada por parte de la Junta de Andalucía y estamos pendientes de que el Ayuntamiento de Málaga nos confirmen si aceptan, cumpliendo la norma estatal, la zona azul para personas de movilidad reducida», continuaba Sarah Almagro. «Es hora de que las palabras se conviertan en hechos», concluía la Malagueña del Año.
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