Borrar

Volar lejos

VOLTAJE ·

Echo de menos coger un avión, aunque el embarque 'low cost' resulte a veces tan desagradable

Jueves, 10 de junio 2021, 08:27

Comenta

A las dos de la mañana ha sonado una masiva estampida de gaviotas. Parece que son las únicas que han salido. El lunes, sin embargo, ... más de uno se lo estaría pasando bien. Ese día registramos la primera víctima de la nueva temporada de 'balconing', un movimiento vertical que por fortuna no se ha puesto de moda entre nosotros, pero cuya influencia ha viajado desde las Islas Baleares hasta la Costa del Sol. Ya en mayo perdimos a una turista que se cayó de una terraza, pero aquello fue muerte por selfi. Este lunes por la tarde, unos jóvenes visitantes celebraron una fiesta 'very British' en un apartamento turístico en San Pedro (Marbella) y decidieron ensalzar la vacuna de Oxford con saltos desde el balcón a la piscina. El resultado es un chico de 31 años ingresado en el hospital, en estado crítico e iba a decir que inconsciente, pero la conciencia ya la había perdido justo antes del salto. Ojalá sobreviva y no tenga secuelas. Pienso que alguien que hace eso, y al que le sale mal, tiene que sentirse un imbécil durante buena parte del resto de su vida. Imagino sin embargo que sobrevivir a un 'balconing' debe de ser una experiencia cercana a la gloria; en caso contrario no se concibe la tontería. La historia tiene tanto valor como el relato, por eso haber estado de viaje y haber vuelto tiene una recompensa extra, que es el poder contarlo. Pues lo mismo con estos saltos. Es razonable pensar que a más de uno le habrá salido bien. Y a más de veinte, claro, pero salir ileso de semejante estupidez ni es noticia ni merece ser comentado en una columna.

Este contenido es exclusivo para suscriptores

Publicidad

Publicidad

Publicidad

Publicidad

Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.

Reporta un error en esta noticia

* Campos obligatorios

diariosur Volar lejos