Regalos políticos

Magallanes era un estrecho. Mandó estrangular hace ahora 500 años, el 20 de diciembre de 1519, al maestre Salomón, que mantenía relaciones sexuales con un ... grumete de 15 años, el cual acabó arrojándose por la borda de la nao Victoria, que había partido tres meses antes de Sanlúcar de Barrameda, ciudad a la que los Reyes Magos han traído un consejero de Turismo, Juan Marín, quien, conocedor de los indiscutibles atractivos de su ciudad, la promociona urbi et orbe desde la Consejería. Marín nació un 31 de diciembre, un mal día para nacer, aunque lo importante es nacer sano y que tu madre se recupere pronto. Peor es nacer el 6 de enero, pues te van a regalar lo mismo, y si encima te ponen de nombre Baltasar la llevas clara: no te dejan ni el desahogo del santo. Sanna Marin también era de las más chicas, pero no tanto ya que nació en noviembre, como Juan Sebastián Elcano, que capitaneaba una de las naos de la expedición mandada por Magallanes, el estrecho, pero fue el que culminó la circunnavegación, pues Magallanes murió flecheado a los 41 años, en Filipinas. Elcano murió a los 50 y pudo contar la gesta, aunque el que la contó más famosamente fue Pigafetta, italiano como Salomón y el grumete, y se olvidó en su narración de Elcano. Las relaciones homosexuales en los barcos eran frecuentes, y el capitán que pilló a Salomón propuso saldar el asunto con unos latigazos y a otra cosa, mariposa, pero Magallanes, aunque los casos se contaran a mogollones, ordenó que Salomón fuese estrangulado para que no corriese el aire. Cuando te estrangulan el oxígeno deja de regar el cerebro, y tal vez la última función del de Salomón fue desear que Magallanes fuera atravesado por una flecha.