Lo que hacen con las heces
A veces la intimidad se sale de la esfera personal y provoca daños
Nuestros ríos son las heces que van a dar al mar, que es el morir. La Guardia Civil investiga a ocho cargos públicos de Alhaurín ... el Grande, entre ellos la actual alcaldesa y el alcalde anterior, por vertidos fecales. En Perú han condenado a un turista argentino por defecar en las ruinas de Machu Picchu. En 2017 fue denunciado un turista español de 80 años por defecar en las ruinas de Pompeya. Un año antes, un alemán de 27 años fue detenido en Las Palmas por provocar un incendio al quemar papel higiénico tras defecar en el campo; dicho incendio causó la muerte a un agente forestal y calcinó cinco mil hectáreas. El verano pasado la Guardia Civil detuvo a un joven de Sabadell por defecar en el interior del Santuario de la Fuensanta de Villanueva del Arzobispo, en Jaén. En Málaga no se tienen noticias de excrementos humanos fuera de lugar, pero el ayuntamiento se dispuso a instalar varios aseos públicos en el centro histórico el verano pasado tras el pliego aprobado casi un año antes. El turista argentino del Machu Picchu, Nahuel Gómez, ha sido condenado a tres años y medio de cárcel, ya que además de dejar el excremento tomó una piedra que se cayó de una altura de seis metros, dañando el suelo del Templo del Sol. En Perú no se entra en la cárcel por penas menores a cuatro años, así que Nahuel, nombre mapuche, podrá volver a Argentina tras pagar una multa. Eso sí, no podrá defecar en Perú en al menos los 15 años en los que le han prohibido regresar.
En España se entra en la cárcel a partir de dos años de condena, siempre y cuando no se tengan antecedentes. Dos años es la condena que se le impuso al británico que atropelló mortalmente a una mujer boliviana que cruzaba un paso de cebra en Marbella. Este británico ya había sido condenado a un año por introducir a una mujer letona en su coche contra la voluntad de ella. Nunca más se volvió a ver a la modelor letona. En Israel han condenado a la modelo Bar Refaeli por evasión fiscal y su madre se ha ofrecido para entrar en prisión en lugar de ella. Madre no hay más que una, normalmente, pero ésta le puso ese nombre parrandero a su hija y ahora tal vez busque compensarla. En mi primera juventud había un bar Rafael en El Palo y una noche un amigo mío fue atropellado al salir de allí sin que se encontrase al culpable. Pero hablábamos de heces. La escatología es la parte de la teología que estudia el destino último del ser humano. Pero la escatalogía también se ocupa de lo relacionado con los excrementos. Tiene su importancia. El vertido fecal investigado por Seprona en Alhaurín el Grande es muy grave. Para el nombre de la operación no se han andado con chiquitas: vastum, vertido en latín. Excremento se decía stercus. Caca se decía caca.
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