¡Ojo con las expectativas y con los resultados!

En esta campaña electoral que encara la recta final ya se han creado unas expectativas para cada partido que puede provocar frustraciones y subidones que ... están muy lejos de la realidad. Con las encuestas en la mano, se da por sentado que Juanma Moreno va a conseguir más votos que toda la izquierda junta y que va a poder gobernar por ello en solitario. El problema puede venir si el PP al final se queda por debajo de los 45 escaños. ¿Sería ese un buen resultado? Si se miran las expectativas no lo sería, porque ya se ha creado ese ambiente triunfalista, pero sin duda sí sería un gran resultado, porque no hay que olvidar que los populares parten del peor resultado de su historia, con apenas 26 parlamentarios. Conseguir superar los 40 ya sería objetivamente un gran triunfo, porque para empezar sería el primer partido en Andalucía, 'título' que ostenta en estos momentos el PSOE. Aumentar la representación un 50% de una elección a otra lo firmarían todos los partidos del mundo. Con el PSOE puede ocurrir lo mismo, pero al contrario. La expectativa que se está creando en torno a Juan Espadas es que puede repetir los datos que obtuvo Susana Díaz en las elecciones en las que perdió el poder, aunque fue la ganadora de las elecciones. No perdamos ese pequeño detalle. Si Espadas al final lo consigue podría parecer que ha cumplido las expectativas, pero la realidad objetiva sería otra. Repetir el peor resultado de la historia del PSOE en unas elecciones autonómicas sería otro fracaso estrepitoso, se mire por donde se mire, entre otras cosas porque podría dejar de ser la formación política favorita para los andaluces. En tercer lugar está Ciudadanos. La expectativa que se está creando es que va a desaparecer o que va a tener una representación mínima en el Parlamento de Andalucía. Juan Marín se presentará muy feliz la noche electoral si finalmente consigue representación y parecerá poco menos que extasiado si logra tener grupo parlamentario al tener al menos cinco representantes. Pero si se miran los resultados se habrá dado una de las tortas más grandes de la historia si perdiera 15 de los 21 parlamentarios que tiene actualmente y que les ha permitido entrar en el Gobierno de la Junta de Andalucía. Después está Vox, que está vendiendo que su candidata va a protagonizar el 'Macarenazo'. Si las expectativas que les dan las encuestas, en las que parecen que van a ser determinantes y que van a entrar a gobernar en coalición con Juanma Moreno, no se cumplen parecerá que han fracasado de manera estrepitosa. Y no hay que olvidar que Vox parte de una posición débil en el Parlamento, con sólo 12 diputados. Es la quinta fuerza, aunque pueda parecer lo contrario. Si al final consiguen situarse en torno a la veintena y se convierten en la tercera fuerza de Andalucía será un éxito, con independencia de que entre o no en el Gobierno. En cuanto a la izquierda, hay que partir de la base de que en las anteriores elecciones autonómicas consiguieron 17 parlamentarios, uno de los mejores resultados que han obtenido en la historia en Andalucía. Con la división, a Por Andalucía se le sitúa sobre la decena de representantes. Las expectativas creadas son la de perder presencia en el hospital de las Cinco Llagas, sede del Parlamento andaluz. Si finalmente consiguen entre los dos mantener esa representación se venderá como un gran éxito, cuando la realidad sería que se quedarían igual que en las pasadas elecciones. Ni fu, ni fa.

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