PSOE y Podemos normalizan sus tensiones internas

Los de Pablo Iglesias creen que el texto supone un «bloqueo» a la 'Ley LGTBi' y la 'Ley Trans', dos de los proyectos estrella del departamento que dirige Irene Monteo. El diputado de Unidas Podemos Ismael Gómez Cortes acusó durante el Pleno a los socialistas de actuar de manera «unilateral» frente a las negociaciones que ambos grupos han mantenido a lo largo de siete meses. «Se desvirtúa en el fondo y en la forma el pacto de coalición», recriminó el parlamentario, que considera que la 'Ley Zerolo' es «demasiado tímida» y supone una «oportunidad perdida».

Desde Unidas Podemos justificaron el plante a sus socios de gobierno con su abstención alegando que con ella «no se ha impedido» el trámite de la Proposición de Ley. Sin embargo, desde Igualdad llevan denunciando varios días que los socialistas tratan de evitar llevar sus propuestas al Consejo de Ministros del próximo 23 de febrero, algo que, según fuentes del ministerio, les habían prometido.

Las relaciones también se han visto agravadas en las últimas semanas por la campaña emprendida por Unidas Podemos para denunciar la «falta de normalidad democrática» que consideran que existe en España. Varios ministros socialistas como la titular de defensa, Margarita Robles, la de Asuntos Exteriores,Arancha González Laya, o la vicepresidenta primera, Carmen Calvo, entraron al trapo de la polémica desautorizando en público las palabras de Pablo Iglesias.

A esta discrepancia, que ha tenido un impacto internacional tras la detención este martes del rapero Pablo Hasél, se le suman la batería de doce enmiendas que el grupo parlamentario de Unidas Podemos ha presentado al Ingreso Mínimo Vital, otro de los frentes económicos abiertos en la coalición junto a la regulación de los precios del alquiler. En un comunicado, los morados denuncian que esta herramienta, aprobada cuando la primera ola de pandemia castigaba al PIB de España con mayor intensidad, «funciona mal» y «no llegue a todas las familias a las que tiene que llegar».

Entre las enmiendas presentadas se incluyen medidas para incluir entre los beneficiarios a aquellas personas que entran en situación de vulnerabilidad durante el propio ejercicio o para que no computen para el acceso a las ayudas por situación de dependencia ni tampoco, cuando no se estén cobrando, las prestaciones por desempleo.

En este contexto tanto Pedro Sánchez como Pablo Iglesias han aprendido a cohabitar con cierta comodidad, y asumen que los tres años que le restan a la legislatura se jugarán en terreno minado. El líder de Unidas Podemos describe la situación como «normal» y ayer, en una disertación en Twitter alegó que el Gobierno es también «un terreno de tensión ideológica y de confrontación de intereses». Un mensaje que también llevaba un recado para los socialistas: «Lo que no es normal es el cada vez más obvio 'traje nuevo del emperador' que algunos siguen afirmando», apuntó en referencia a la fábula infantil, conocida también como 'El rey desnudo'.

Desde el PSOE ya se han habituado a restar importancia a las puyas moradas. La portavoz del Gobierno, María Jesús Montero, garantiza que la coalición sigue trabajando «con estabilidad» y «unidad de acción», y que esto «no es incompatible con que se produzcan diferencias».