Anticorrupción se pronunciará sobre la reapertura de 'Kitchen' para Cospedal

La aparición de nuevos audios del comisario José Manuel Villarejo con grabaciones de conversaciones con la ex secretaria general del PP han reactivado la maquinaria judicial. El PSOE, que ejerce la acusación popular en el procedimiento, reclamó al juez Manuel García Castellón en un escrito que valorara la existencia de nuevos elementos incriminatorios sobre el supuesto conocimiento de Cospedal del espionaje parapolicial a Luis Bárcenas. Y el magistrado ha pedido ahora a la Fiscalía que se pronuncie antes de tomar una decisión.

Fueron precisamente los fiscales del caso quienes recurrieron el archivo provisional dictado en su momento por García Castellón contra Cospedal y su marido, el empresario Ignacio López del Hierro. Pero el tribunal de la Sala de lo Penal, presidido por Alfonso Guevara, confirmó el sobreseimiento por la vaguedad de los indicios contra ellos, ya que reunirse con Villarejo no supone que conocieran el plan orquestado desde el Ministerio del Interior para vigilar al extesorero del PP y recuperar información confidencial en su poder, según argumentó la Sala.

Ahora, con los nuevos audios difundidos sobre Cospedal, en los que pide a Villarejo parar la difusión de la «libretita» -refiriéndose a los 'papeles de Bárcenas'-, el PSOE considera que existen indicios de que sí conocía el operativo. En su escrito solicitaron que estos audios, que no constan en el sumario, se aportaran a la Audiencia Nacional, así como que se realizaran pruebas periciales para certificar la voz y que se pongan a disposición de las partes. Ahora, con lo que diga Anticorrupción, el juez García Castellón tendrá que decidir.

El contexto de esta conversación se produjo tras la publicación de los llamados 'papeles de Bárcenas' en enero de 2013. Una circunstancia que desató una polvareda en el seno del PP, entonces atenazado por el 'caso Gürtel' y el conocimiento de que su extesorero tenía una fortuna oculta en Suiza que alcanzó los 47 millones de euros.

Estas anotaciones recogían que casi toda la cúpula del PP, incluido el expresidente Mariano Rajoy, habían estado cobrando sobresueldos opacos al fisco. Fondos gestionados por Bárcenas procedentes en gran parte de donaciones ilegales de empresas contratistas de administraciones gobernadas por los populares.

El cobro de sobresueldos en sobres se venía realizando desde hacía 20 años antes, desde 1990, según las anotaciones de Bárcenas. Y los papeles registraban que casi todos los altos cargos populares de esa época y sucesivas habían recibido dinero de la contabilidad paralela del partido.

Tras estos hechos en el PP cundió la alarma. Y pocos meses después se puso en marcha desde el Ministerio del Interior, supuestamente, una operación parapolicial, denominada 'Kitchen', para conocer si Bárcenas tenía nuevas pruebas en su poder. Se llevaron a cabo seguimientos contra el extesorero y su familia, y se llegó a entrar en una local privado de la mujer de este, Rosalía Iglesias, para recuperar documentación.

Estos hechos serán juzgados próximamente en la pieza separada del 'caso Villarejo' referida a la citada 'operación Kitchen'. El sobrenombre que le dio el comisario a este plan en recuerdo del chófer de Bárcenas Sergio Ríos, que fue captado por los implicados, recibió un sueldo a cargo de fondos reservados de Interior y acabó ingresando en la plantilla del Cuerpo.

En los nuevos audios conocidos la semana pasada se oye a Villarejo decir que «hay que laminar al cabrón este de Bárcenas», a lo que Cospedal añade: «Eso lo tengo más claro que el agua». El audio completo pondría de manifiesto que Cospedal sabía de su existencia y, además, trató por todos los medios de que no saliesen publicados.