Cuadrado y James hacen soñar a Colombia

En la primera parte primó la táctica sobre la emoción. Sólo Cuadrado y James Rodríguez daban aire a los cafeteros. La única gran ocasión de este periodo llegó en el 27, cuando James asistió a Teo pero el delantero remató muy desviado.

Los marfileños, desactivados al principio por la presión asfixiante a Yaya Touré, mejoraron en la reanudación pero la incorporación de Quintero fue decisiva. Cuadrado dio el primer aviso. Controló un gran pase de James, hizo una bicicleta y su tiro cruzado fue despejado al palo por Barry.

Didier Drogba entraba al campo para socorrer a sus compañeros pero, un par de minutos más tarde, el portero africano no pudo desviar el remate de cabeza al primer palo de James en un córner botado por Cuadrado y Colombia se adelantó. La reacción llegó con un centro-chut de Aurier que despejó Ospina y un posible penalti por mano en un tiro libre de Yaya Touré.

Sin embargo, la mala suerte se cebó con Die, cuyas lágrimas durante el himno conmocionaron al mundo. El mediocentro, que unas horas antes del encuentro había recibido la noticia de la muerte de su padre, perdió un balón en defensa que Teo y Quintero convirtieron en el segundo tanto de Colombia.

En el minuto 73 Gervinho, en una gran jugada personal desde la izquierda, recortaba distancias y acababa por unos minutos con el sueño de Ospina de batir el récord de imbatibilidad de su ídolo, Higuita, en Italia'90. Esa selección llegó a octavos sin ganar dos partidos. Esta lo hace con unas sensaciones inmejorables, pese al sufrimiento final.