Qué coche comprarle a tu hijo por menos de siete mil euros

En SUR sabemos que es una fecha complicada y que, guste o no, no se puede esquivar. Así que, ya que tu hijo va a moverse en un amasijo de hierro a velocidades vertiginosas, que menos que dicho amasijo de hierro sea seguro. Para facilitarte la búsqueda, hemos recopilado una selección de cinco vehículos por menos de 7.000 euros lo suficientemente urbanitas para satisfacer las necesidades de un conductor novel y protegerle en caso de que sea necesario.

Con una estética muy atemporal que consigue seguir viéndose como vehículo moderno incluso después de 24 años de su lanzamiento. Consumos bajos, estética pintona y buena habitabilidad interior. Consiguió cuatro estrellas Euro NCAP en su día en el apartado de protección de los ocupantes. Eso sí, mejor no atropellar a nadie con este pequeñín que no llega a la tonelada, porque en el apartado de protección contra peatones se queda en una escueta estrella.

Es un coche ligero y fácil de conducir, con potencia suficiente para ir del punto A al punto B sin complicaciones, pero con potencia insuficiente para 'hacer el cabra' (aunque esto es algo que se puede hacer con cualquier coche, el A2 no se presta mucho a ello). Con el 1.4 gasolina de 75 caballos acelera de 0 a 100 en 12,3 segundos y alcanza una punta de 173 kilómetros por hora.

La primera generación del utilitario 'grande' de Smart compartía multitud de elementos con el Mitsubishi Colt de la época, como el propio chasis o la suspensión. Al igual que el A2, es un vehículo ligero (poco más de una tonelada), con muy buenos consumos y buena habitabilidad interior. Además, independientemente de que guste más o menos, tiene una estética pintona y diferente, con un carácter muy marcado. Se vendió con diversas motorizaciones, tanto diésel como gasolina, con potencias que van de los 68 caballos a los 122. En caso de impacto se trataba de un vehículo con un chasis bastante rígido, capaz de proteger a sus ocupantes dentro de la cabina en la mayoría de los casos. El Smart Forfour consiguió 4 estrellas Euro NCAP en la protección de adultos.

También existía una versión Brabus de 177 caballos, aunque esa probablemente se antoje como algo más peligrosa por sus ganas de correr... y lo que corre.

Para amateurs o para familias al completo. Es realmente un coche para toda la familia. Algo más tragón que los dos modelos anteriores, pero con una fiabilidad a prueba de bombas. Es un coche estupendo para su uso diario, para moverse por ciudad y realizar alguna que otra escapada. Su habitáculo es realmente amplio. Los nipones han sabido aprovechar al completo las dimensiones del vehículo para ofrecer la mayor habitabilidad posible a sus ocupantes. Además, cuenta con multitud de recovecos para dejar objetos. La banqueta trasera esconde un baúl bajo los asientos para mejorar aún más sus capacidades a la hora de guardas objetos. Como punto débil, su maletero es algo escueto, aunque teniendo en cuenta sus medidas es algo lógico.

Se trata de un coche muy suave, con una dirección bastante asistida y unas prestaciones que se alejan en todo momento de cualquier pretensión deportiva. El Honda Jazz de segunda generación cuenta además con 5 estrellas Euro NCAP.

Sí, es cierto, no es el coche más tranquilito del mundo. De hecho, es picante, juguetón y le gusta correr. Pero eso no tiene porque ser malo. Esta clase de coches suele tener un paso por curva bastante mejor que aquellos que no buscan ofrecer ninguna deportividad a su piloto. Además, que busquemos seguridad para nuestro hijo no significa que tenga que aburrirse conduciendo... El pequeño Cooper consigue cinco estrellas Euro NCAP en protección de sus ocupantes adultos.

Su motor, un 1.6 de 122 caballos atmosférico no es precisamente económico, pero tampoco tiene unos consumos alocados. Podemos dejarlo en una media de siete litros y medio en consumo combinado sin necesidad de llevarlo muerto en todo momento. Empuja bien siempre que lo llevemos alto de vueltas y tiene un carácter alegre, pero no es un rompe cronos.

Su estética es, además, la más pintona de la lista y completamente atemporal. Como pero, no es tan habitable como el resto de modelos mencionados. Aunque teniendo en cuenta de que se trata de un vehículo para jóvenes, la habitabilidad tampoco debería ser un gran problema.

La cuarta generación del Ibiza es ya un coche serio, un vehículo con capacidades suficientes para suplir las necesidades de cualquier pareja, más aún de un joven que acaba de sacarse el carnet. Es un coche con un chasis muy bien calibrado, que permite salir a carretera y realizar viajes largos sin problema. Tiene buena conectividad para el info entretenimiento, una buena habitabilidad, buen maletero y una amplia gama de motores para todos los gustos, con consumos muy contenidos en la gran mayoría de los casos. El Ibiza es una apuesta segura: son vehículos fiables, con un aprobado en todos sus apartados para el día a día. Además, no estamos ante un vehículo que tenga ningún tipo de pretensión deportiva, pero que al mismo tiempo se comporta muy bien. Es, además, un cinco estrellas Euro NCAP.