Borrar
Cinco empleados de una empresa mueren en un accidente de tráfico en Sevilla Efe
Estas carreteras tienen peligro: los tramos con más accidentes por autonomía

Estas carreteras tienen peligro: los tramos con más accidentes por autonomía

La Rioja y Cataluña encabezan la clasificación en número de siniestros recurrentes

Juan Roig

Jueves, 9 de marzo 2023, 11:22

Necesitas ser suscriptor para acceder a esta funcionalidad.

Compartir

En España existen 1.836 kilómetros de carreteras con un riesgo elevado de accidentes. Así lo pone de manifiesto el último informe publicado por la asociación europea de valoración del estado de las carreteras, EuroRAP.

Sus datos, recogidos por RACE, llevan estudiando el estado de las vías nacionales desde el año 2000 y se basan en analizar las secciones más peligrosas de las carreteras, tomando como datos los accidentes acontecidos en los tres años previos a su elaboración.

Esto supone que hay tres años de decalaje y el informe de 2023 contempla los accidentes mortales y graves que ocurrieron en los años 2018, 2019 y 2020. En total, este número ascendió a 3.067 personas en 1.395 tramos, que en total suman 25.100 kilómetros.

Los tramos se puntúan en función de un índice de riesgo (IR), el cálculo del número de accidentes mortales y graves ocurridos en el periodo de estudio por cada 1.000 millones de vehículos por kilómetro. Este número determina si el riesgo de una vía es bajo (hasta 7,5), bajo-medio (hasta 30,8), medio (hasta 53), medio-alto (hasta 90) o alto (más de 90).

En España, la gran mayoría de tramos de accidentes gozan de «peligrosidad aceptable». Es decir, un 82,9% de las vías que registraron siniestros tienen una puntuación por debajo del 30,8. Los tramos de riesgo medio suponen un 8,9% del total, o 2.170 kilómetros, mientras que los de los de las dos categorías más elevadas se corresponden al 8,2% restante: 1.836 kilómetros.

Para localizar los tramos de carreteas más peligrosos, introduce en el buscador la Comunidad Autónoma correspondiente, y podrás ver los tramos kilométricos que figuran en el informe:

De estos, los tramos con un índice de riesgo superior a 90 comprenden 734,2 kilómetros, mientras que los de riesgo medio-alto comprenden 1.102,3 kilómetros, un 3,6% y 4,6% del total, respectivamente.

Sin embargo, los datos de EuroRAP tienen que ser destilados, porque uno de los factores de la peligrosidad de la vía es el número de vehículos que circulan a diario a través de ella. Concretamente, son inversamente proporcionales, dado que cuando pasan más de 10.000 vehículos al día por un tramo, no existe ninguno tipificado como de riesgo alto y solo uno como de medio-alto.

Por ello, RACE ha depurado el listado y de los 114 tramos que superan los 53 puntos del índice, han eliminado todos aquellos con una circulación menor de 2.000 kilómetros al día y una longitud inferior a cinco kilómetros. El motivo es que «en dichos tramos es más significativa la aleatoriedad de los accidentes y pueden dar lugar a incoherencias en los resultados finales». En su selección final de 45 tramos –presentes en la tabla de la siguiente página– han localizado ocho tramos «negros», de alta peligrosidad, que suman entre s 93 kilómetros; y 37 tramos «rojos», de riesgo medio-alto, que se corresponden a 658,3 km.

Estos, según la asociación española, «presentan una consistencia suficiente y son en los que se debe centrar la atención para reducir sus niveles de accidentalidad». En ellos se produjeron 202 accidentes, con 62 fallecidos y 197 heridos graves, con un paso medio de 3.522 coches al día.

Vías peligrosas

A raíz de la clasificación de las carreteras, se pueden sacar varias conclusiones. La primera de ella es que las vías de gran capacidad son mucho más seguras, porque eliminan dos de los principales factores de riesgo de accidentes: la invasión del carril contrario y la presencia de intersecciones a nivel. Además, cuando ocurre un siniestro, este suele tenerconsecuencias menores, al contar con mayores elementos de seguridad pasiva.

Así, casi el 14% de las carreteras de una sola calzada–es decir, un carril para cada sentido– tienen índices de riesgo superiores al 53. Comparativamente, en las vías de dos calzadas, este indicador se reduce hasta el 0,37%.

El tramo más peligroso de España se encuentra en la carretera N-634, que recorre toda la costa cantábrica, desde Santiago de Compostela hasta San Sebastián. Concretamente, los 10,3 kilómetros comprendidos entre los 232,8 y 243,1, en la parte cántabra. En tres años comprendidos en el estudio, se produjeron siete heridos graves.

Además, entre los ocho tramos negros del trienio 2018-2020, dos vuelven a aparecer como reincidentes: la N-340 en Granada, con un IR que pasó de 93,6 a 112; y la N-345 en Murcia, que pasó del 98,6 a 106,5. Estos dos, según RACE, «han sido la evolución de situaciones que se venían anunciando en estudios anteriores y en los que no se han llevado a cabo las medidas correctoras pertinentes.

La peligrosidad que presentan las vías de una Comunidad Autónoma se miden en el porcentaje de tramos de riesgo que presentan en el total de su red viaria. Por lo tanto, regiones con una extensión pequeña, en las que abundan las carreteras convencionales de un carril salen peor paradas en relación a la media. Así, La Rioja es el territorio con más riesgo, con un 17,2% del total, considerablemente por encima de la media nacional, del 7,3%. Otras comunidades que superan esta media son Castilla y León (7,9%), Galicia (10,8%), Asturias (11,6%) y Cataluña (12,6%).

Hay que tener en cuenta que el estudio de EuroRAP no se efectuó el año pasado por las condiciones de la pandemia, pero 2022 se saldó con datos de mortalidad en carreteras un 4% superiores a los de 2019, con 1.145 fallecidos. Según analistas de Pons Mobility, «el modelo de seguridad d vial de la DGT empieza a dar síntomas de agotamiento por su posición política y romper la tendencia no va a ser fácil».

Reporta un error en esta noticia

* Campos obligatorios