Los Tedax retiran un proyectil, presumiblemente de la Guerra Civil, de una playa de Marbella

Poco podía imaginar el equipo de Menia Restauración la sorpresa que les deparaba el día cuando se disponían a estudiar el entorno del muro exterior de una casa que fue dañado por un temporal el año pasado.

«Hemos encontrado un proyectil no detonado y hemos llamado a la Policía Nacional que han venido a valorarlo y han activado el protocolo», ha relatado a este periódico el arqueólogo Miguel Vila. «Ellos han llamado a los Tedax, que han venido de Málaga y lo han retirado. No sabemos si lo detonarán o no de forma controlada», ha apuntado.

«Nosotros estamos haciendo unos sondeos arqueológicos preventivos en ese entorno», ha explicado. El muro perimetral de la vivienda que hay al lado de las termas se cayó hace un año y medio en el tramo que da a la playa con la avenida de las olas en un temporal y desde entonces el propietario viene intentando repararlo haciendo gestiones con la administración. Una de las cuestiones que le impone la administración es un sondeo arqueológico previo para saber si la reparación del muro afecta o no a restos arqueológicos. «De momento no estaba saliendo nada hasta este momento en el que hemos encontrado el proyectil», ha precisado.

Vila ha precisado que se trataba de un artefacto de unos 40 centímetros que «estaba muy oxidado», por lo que no descarta que hubiera podido estar en el mar y que el oleaje lo hubiera desplazado. Aunque a él no le había sucedido nunca, entiende que la aparición de proyectiles es algo «recurrente» y estima que pueda ser de la Guerra Civil Española, si bien no está en disposición de confirmarlo.

Donde sí es habitual encontrar este tipo de bombas en la playa es en la zona desde Málaga hacia Almería como consecuencia de los bombardeos a la población civil durante La Desbandá, señala el especialista, al que, sin embargo, no le consta que «hubiera bombardeos tan atrás».

Tras la llamada de los arqueólogos, la Policía Nacional se personó en la zona y tras acordonarla y asegurarla esperó la llegada de los Tedax que retiraron el artefacto sin incidente alguno en torno a las dos de la tarde.