Sandra Gámez, masajista: «Esta pelea contra los manteros nos está afectando en los negocios y en el turismo»
Trabajadores de los establecimientos del entorno de la playa del Faro en Marbella alzan la voz contra los fuertes dispositivos contra la venta ambulante que «están manchando la imagen de Marbella»
María Albarral
Marbella
Martes, 22 de julio 2025, 17:54
Este fin de semana la playa del Faro de Marbella ha sido escenario de un altercado entre la Policía Local y dos bañistas a causa ... de una intervención contra la venta ambulante. Las redes sociales se hicieron con los vídeos que muestran cómo un agente le propina varias bofetadas a uno de los turistas. La escena está aún muy presente entre los trabajadores de los negocios del entorno así como entre los testigos presenciales. «No puede seguir esta pelea contra los manteros porque nos está afectando en los negocios y en el turismo», relata a SUR, Sandra Gámez, masajista en dicha playa.
La joven marbellí estuvo presente durante el altercado y asegura que «el agente le dio varias bofetadas al turista» a la vez que narra cómo vivió los hechos. «Estaba con una clienta y de repente escuchamos gritos. Los comensales del restaurante se fueron todos donde estaba siendo la pelea para intentar mediar», asevera a la vez que critica que «ya se están repitiendo demasiados episodios iguales porque no es la primera vez». Sandra señala que «la policía entra con los quads a la arena detrás de los manteros dando gritos y revolviendo las papeleras» así como critica que «en este negocio la gente busca relax y así no hay manera de poder trabajar además de la mala imagen que estamos dando al turista».
Por otra parte, Dakar, camarero del negocio donde ocurrieron los hechos asevera que «en ningún momento el vendedor ambulante pegó a los policías» aunque sí matizó que «les pedía que le devolvieran su mercancía». Otro trabajador del entorno lamenta «la presión que hay contra los manteros que, realmente, no le hacen daño a nadie».
Otro del los testigos relata a este periódico que «el enfado del agente vino dado porque uno de los bañistas empezó a tocar el claxon del quad policial antes de entrar a defender al vendedor ambulante» a lo que añade que «el segundo turista, realmente no fue a defender al mantero, sino al bañista que estaba siendo abofeteado por el policía local».
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