Izquierda Unida y Podemos denuncian la «deriva privatizadora» del presupuesto

El portavoz de la coalición de izquierdas, Miguel Díaz, que ayer valoró en rueda de prensa los presupuestos para el año que viene, advirtió de que las prácticas privatizadoras traen consigo precariedad laboral, pérdida de calidad en la prestación de los servicios públicos y que además suponen una de las puertas de entrada de la corrupción. La viceportavoz Victoria Morales añadió, por su parte, que el documento diseñado por PP y OSP da la espalda a las políticas de Igualdad, incumpliendo el compromiso plenario de ambas formaciones, a instancia de IU, para implementar programas concretos destinados a la atención a las víctimas de violencia de género por un importe mínimo de 100.000 euros, y para las que el presupuesto de 2019 sólo prevé 42.100 euros.

Punto y aparte merece para la formación el capítulo de inversiones, al «no sustentarse en la realidad» por falta de garantías en la propia capacidad de financiación o porque los proyectos no están suficientemente tramitados en aspectos clave, como la viabilidad técnica o la disponibilidad y compatibilidad urbanística. De hecho, el portavoz llamó la atención sobre la existencia de un informe de la Intervención en el que se alude literalmente a la «indeterminación de las inversiones».

Igualmente desde Costa del Sol Sí Puede, la marca local de Podemos en Marbella, se criticó la «deriva privatizadora sin precedentes» de las cuentas y su falta de rigor. «Son unos presupuestos típicos de un año electoral para el PP, cargados de contrataciones temporales de afines, multitud de privatizaciones para los amigotes, reparto de subvenciones por doquier, cambios de aceras y mucho, mucho, mucho asfalto, que no falte el asfalto, pero sin levantar el asfalto para arreglar lo que hay debajo», afirmó la concejala de CSSP Victoria Mendiola.

La edil subrayó que estos prepuestos lejos de mejorar la calidad de vida de las personas «la deja igual o peor» y aludió a la carencia de partidas para adquirir suelo destinado a la construcción de vivienda pública o para la promoción en los suelos disponibles del propio Ayuntamiento, «algo prioritario para los jóvenes y familias que no pueden acceder a una vivienda ni a un alquiler». La formación morada también echa en falta partidas concretas para aparcamientos, guarderías, espacios culturales o instalaciones deportivas.