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La clausurada biblioteca pública Camilo José Cela, ubicada en pleno centro de Marbella, se convertirá en sede de oficinas municipales. Según ha podido confirmar este periódico, el Ayuntamiento impulsará el acondicionamiento del local, de titularidad propia y sin uso desde hace un quinquenio, como sede administrativa. Trabajos para los que se han destinado casi 80.000 euros y que ya se encuentran en fase de contratación tras confirmarse desde la delegación de Obras el cese de las históricas filtraciones de agua que se producían desde el mercado central hacia la planta sótano donde se ubicaban las mesas de lectura.
En concreto, el proyecto para acondicionar la antigua biblioteca como sede de oficinas del Ayuntamiento ha salido a concurso con un precio base de licitación de 79.974,92 euros y un plazo máximo de ejecución de un mes. El concejal de Obras, Diego López, subraya que este nuevo proyecto, que en cuestión de meses será una realidad si el proceso administrativo fluye de forma normal, permitirá poner en uso un local con más de 800 metros cuadrados de superficie situado en el centro de Marbella y que se clausuró en abril del año 2015.
Según se describe en la memoria del proyecto, las obras consistirán en el «acondicionamiento del local con el fin de trasladar diversos servicios a este emplazamiento, mejorando las instalaciones que tienen en la actualidad dichos servicios y dando al personal municipal unas mejores condiciones de trabajo y a los usuarios una mejor calidad en el servicio».
La citada memoria consultada por este periódico contempla la ejecución de una sala central con puestos multifunción, dos salas de reuniones, cinco despachos, un archivo, una sala de trabajo y aseos. Asimismo, se prevé remodelar la instalación eléctrica, instalar una red de datos, sustituir la puerta de entrada al local, así como dotar al archivo de una puerta con resistencia al fuego y sustituir las existentes en las vías de evacuación con palanca antipánico. El proyecto contempla también trabajos de pintura, así como el abrillantado del suelo y la sustitución del techo con placas desmontables. El plazo de ejecución de las obras será de un mes, a partir de la adjudicación y firma del acta de replanteo.
El equipo de gobierno del PP decidió en abril de 2015 cerrar la biblioteca pública que funcionaba en la planta inferior del mercado de abastos de Marbella después de que fracasaran diferentes intentos de impermeabilización del edificio. Pero esta pasada primavera, tras una nueva intervención para atajar las filtraciones tanto de la cubierta hacia el mercado y de los puestos hacia la planta sótano y comprobar la ausencia de goteras, la delegación municipal de Obras ha podido impulsar el proyecto de acondicionamiento de las instalaciones ocupadas por la antigua biblioteca. Desde la delegación que dirige Diego López explican que las pruebas de carga llevadas a cabo tras las obras realizadas en el mercado certifican que no se producen pérdidas y que por tanto, el local del sótano donde se pretenden reubicar distintos servicios municipales está a salvo de las goteras. «Se ha hecho un rediseño de todos los conductos de saneamiento y eso ha facilitado que no haya ningún tipo de atoro», afirma el edil del ramo respecto a los trabajos realizados en el edificio. Esta situación permite trasladar a la citada planta servicios municipales que están por definir con instalaciones y redistribuciones nuevas de despachos para personal municipal.
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