Piden 20 años de cárcel para la modelo acusada de matar a su exnovio en Estepona

El crimen, que tuvo repercusión internacional, sucedió el 5 de abril de 2014 en la calle Júpiter de la urbanización Sun Beach de Estepona, donde el empresario inglés, que regentaba una conocida cadena de joyerías en su país, tenía alquilado un chalé de lujo con piscina, jacuzzi y un garaje en el que guardaba un Ferrari y un Lamborghini.

Esa noche, sobre las 00.30 horas, Andrew Bush (48 años) llegó a la vivienda en compañía de su nueva compañera sentimental, María Korotaeva, una universitaria rusa de 21 años a la que había conocido en diciembre de 2013 en una cafetería de Bristol, y con la que pretendía pasar un fin de semana romántico. La relación con Kukucova había terminado un mes antes.

Cuando la pareja entró en el chalé, se encontró con la acusada, que estaba en pijama en el piso de arriba. Al verla, Korotaeva se marchó de la vivienda y se sentó a esperar en el Hummer en el que habían llegado desde el aeropuerto. Bush salió tras ella para calmarla. Según el escrito de conclusiones provisionales del fiscal, cuando él volvió a entrar en la casa, la acusada «hizo uso de manera sorpresiva y repentina» de un revólver del calibre 38 «movida por el inequívoco ánimo de acabar con su vida». Bush recibió tres disparos, dos en la cabeza y uno en el brazo izquierdo. «Ante el carácter inesperado e imprevisible del ataque, no tuvo posibilidades de reacción y defensa, ocasionándole la muerte», subraya el fiscal.

Huyó a su país

El escrito de acusación argumenta que Kukucova trató de «procurarse su impunidad» colocando el revólver en la mano izquierda del fallecido. Según el Ministerio Público, después se apoderó de las llaves del Hummer y abandonó el domicilio, asegurándose de cerrar la vivienda para impedir el acceso. Ya en la calle, tras una «acalorada» discusión con Korotaeva, se dio a la fuga en el vehículo, que fue localizado al día siguiente por la policía en Marbella. Kukucova viajó a su país, donde acabó entregándose en comisaría.

La modelo, que ahora tiene 25 años, lleva desde entonces en prisión provisional por estos hechos, que la Fiscalía califica de asesinato. La acusación particular, ejercida por la hija y la hermana de Bush, también pide 25 años para ella por este delito, y añade otros dos más por allanamiento de morada.

La defensa, que dirige el abogado malagueño Carlos Larrañaga, solicita la libre absolución de su clienta al entender que Kukucova «no es autora de ilícito alguno». Y añade en su escrito: «Para el hipotético caso de que quedara acreditada su participación, serían de aplicación las eximentes de «legítima defensa y miedo insuperable. La modelo declaró ante la policía de su país y después ante la jueza en España que Andrew Bush la atacó primero con el arma y que, en el forcejeo, ésta se disparó.