Una versión vegetal del atún de lata

Hoy, ya lo advirtió la influyente consultora internacional Mintel en su 'Informe 2030' sobre tendencias del sector agroalimentario, abrazar una causa justa es tan vital para que una empresa se granjee el crédito del consumidor como vender un buen producto.

En el paseo en barco se habló mucho del problema de las redes de pesca abandonadas en el mar, que representan el 40% de la contaminación por plásticos, y, deliberadamente, nada del producto, que permanece envuelto en el misterio porque se espera que convenza por sí mismo.

Lo primero que ayuda, ya en tierra, a despejar el misterio (y predispone a favor), es ese olor familiar de una lata de atún recién abierta que proviene de las tapas alineadas sobre una mesa: causa limeña, ensaladilla rusa, ensalada fresca, empanada gallega... En todas las preparaciones, el 'atún' elaborado a partir de proteína de guisante, gluten de trigo y aromas, pasa el examen, tanto de sabor como de textura; en este caso deshecha en migas y no sumergida, sino impregnada en aceite vegetal.

El producto se podrá encontrar en la sección de frío de supermercados y tiendas al precio recomendado de 5,50 €, presentado en tarros de 175 gramos de producto. La firma Garden Gourmet, perteneciente al Grupo Nestlé, amplía así su catálogo, hasta ahora de sucedáneos de productos cárnicos (https://www.gardengourmet.es/).