El exótico maracuyá conquista la Axarquía
El delicioso y versátil fruto de una trepadora de América tropical habitual en jardines
Hasta hace pocos años, conocíamos más el maracuyá o fruta de la pasión como ingrediente de zumos o recetas de repostería y cócteles, que como ... fruta en fresco. Sin embargo, la planta Passiflora edulis, enredadera nativa de las selvas tropicales del centro y el sur de América, se sembraba en muchos jardines por la belleza de sus flores, conocidas como pasionarias o clavos de Cristo, y desde hace unos años, distintas variedades se están cultivando con muy buenos resultados en la Axarquía, lo que nos acerca la posibilidad de disfrutar una fruta única y excelente. El botánico Francisco Hernández de Toledo, que viajó a México en 1571 comisionado por Felipe II, la mencionó en sus notas como 'granadilla', y contaba que «en sus flores pueden verse los instrumentos de la pasión de Cristo».
Sobre el fruto decía que tenía forma de globo que los indios abrían para sorber «como un huevo» su pulpa semilíquida, en la que flotan las semillas. Las variedades se estructuran en dos grandes familias: las de fruto amarillo, (granadillas), y las de fruto morado, más sabrosas, intensas y ácidas. El maracuyá ha sido muy estudiado por la complejidad de sus aromas. Más de un centenar de ésteres volátiles hacen que su acidez natural se complemente con notas de melocotón, cítricos o incluso caramelo en la fruta madura (si lo comen en fresco, esperen a que el globo se arrugue), que hacen de esta fruta un ingrediente perfecto para repostería, integrado en macedonias, con yogur, coco o chocolate blanco. Y también en platos salados.
Usos en salado y conservación
No limiten el maracuyá a postres y zumos. Aprovechen su excelente acidez y prueben a usarlo en elaboraciones saladas como vinagretas, adobos y salsas frescas para acompañar las carnes en barbacoa, o como parte del aliño para ceviches de pescado. Una explosión de matices. La pulpa de maracuyá se oxida con facilidad, pero si tienen excedentes y quieren conservarlos, congelarla es muy buena opción. La pectina de las semillas y la cáscara hacen que funcione muy bien en mermeladas.
Un toque de exotismo en cócteles y zumos
El maracuyá es un ingrediente perfecto para coctelería, combinado con destilados blancos. En muchos países de Latinoamérica se le llama parchita, y se combina con naranja y otras frutas en zumos y batidos sin alcohol. Como acidulante, puede sustituir a los cítricos en muchas bebidas refrescantes. Además de las combinaciones mencionadas, en postres va muy bien con chocolate negro o con leche, y Food Pairing recomienda combinarlo con sisho, algas verdes y semillas de cilantro.
Comprar maracuyá
La Huerta de Pancha (https://huertadepancha.online/) es una empresa agrícola familiar que cultiva, entre otras frutas tropicales y hortalizas mediterráneas, maracuyá (tienen varias cosechas al año, entre ellas una ahora) y granadilla.
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