Azulete, cocina contemporánea

Al frente de los fuegos está el propio Gabriel y en la sala Alexis Maurel, quien a su vez se responsabiliza también de la carta de vinos. Una carta corta en referencias y con algunos precios desajustados al alza. Un establecimiento con esta filosofía de cocina requiere de unos vinos en consonancia. Si nos centramos en la carta de platos observamos cómo sobre una buena variedad de verduras pivotan los demás productos, carne o pescado. Una idea que Gabriel plasma fielmente en la mayoría de sus platos, como en el gazpacho de tomate verde, el ceviche de corvina o la panceta con zanahoria caramelizada. También y como un pequeño guiño a esa cocina mediterránea más oriental, el pan cocinado a la brasa y acompañado de cordero mechado con especias y menta puede ser una buena opción a la hora de elegir un plato principal.

Azulete no deja de ser un pequeño, pero muy coqueto, restaurante familiar en el que todos acaban haciendo de todo dependiendo de la afluencia de clientela. El espacio se divide en dos, un comedor interior y una terraza que se abre desde lo alto a la plaza principal de Gaucín, muy agradable para las cenas en este tiempo estival. Otro de sus atractivos además del trato familiar y cercano, son sus precios, bastante comedidos para lo que suele imperar por esta zona de nuestra provincia.

La oferta es corta, pero a su vez suficiente. Unos entrantes perfectos para compartir y media docena de platos principales entre el pescado del día, algún arroz y las carnes, siendo la paletilla de cordero con verduras el más representativo de la cocina de esta comarca en contraposición con el tataki de Angus con brócoli, pak choi y salsa chimichurri, un plato que necesita un mejor afinamiento en cocina para que llegue a la mesa más tierno y con más sabor a carne y no al resto de los ingredientes.

Azulete es uno de esos restaurantes que bien merecen una visita.

Ceviche de corvina

Un ceviche bastante aromatizado con el toque de leche de tigre. Como complemento a la corvina, unos chips de arroz acompañados de un ligerísimo puré de aguacates y cebolla dulce. Refrescante a la vez que contundente.

Gazpacho de tomate verde

Un plato muy colorista y refrescante, quizá uno de los más mediterráneos de toda la carta. Una buena emulsión de aceite y tomates verdes que se complementan con un helado de burrata.

Merluza con brócoli

Varias verduras, espárragos verdes, tirabeques y brócoli para acompasar un lomo de merluza que presentaba un exceso de punto, lo que restaba jugosidad a todo el conjunto del plato.

Arroz al horno

Más que un arroz al horno al estilo levantino, es un arroz seco hecho con caldo de ave y verduras que se termina de elaborar en el horno y posteriormente se sirve acompañado de unos tacos de pollo plancheados. Buen fondo y buena ejecución.