Luis, el chef de Gaucín que cocina para los mejores futbolistas del mundo
Ha cocinado para jugadores de la talla de Haaland, Benzema o Beckham y ahora pone su sello al nuevo brunch que ha puesto en marcha Hard Rock Hotel en Marbella
Pocos cocineros pueden presumir de contar con un currículo tan extenso de comensales ilustres. Haaland, Benzema, Courtois, Beckham, Joaquín, Dina-Ebimbe o Tanguy Nianzou son sólo algunos de los astros que han confiado en este malagueño para deleitarse el paladar y disfrutar de una comida de campeonato. Luis C. Rodríguez, un joven cocinero nacido en Gaucín, ha formado su carrera alrededor del mundo del fútbol. Tanto que ahora lo conocen como el chef de los futbolistas.
Luis trabaja entre fogones desde el año 2007, cuando abrió en su pueblo y junto a su madre el restaurante Tegueste, un establecimiento que era una mezcla de cocina tradicional andaluza y canaria (de donde era la madre). Varias décadas después, y tras pasar por diferentes restaurantes de Londres, Dubai o Ibiza, ha trasladado su cuartel general a Marbella, donde también firma el nuevo brunch que ha puesto en marcha el hotel de cinco estrellas Hard Rock Hotel.
Tras su primera experiencia en el pueblo, este cocinero se marchó a Londres, donde comenzó fregando platos en Brindisa Spanish Foods, una de las cadenas de comida española más famosa de todo Reino Unido. Allí conoció a José Pizarro, el cocinero español más influyente de Londres, y posteriormente se incorporó al equipo del restaurante de alta cocina Aqua Shard, en donde tuvo el primer contacto con futbolistas.
Pese a esos primeros contactos esporádicos -también trabajó para los hermanos Adriá-, Luis giró su carrera hacia el mundo de la pelota (y de las celebridades en general) ya de vuelta a Marbella. Mientras trabajaba en un restaurante de moda en la Costa del Sol, sentó en una misma mesa a Haaland y a Joaquín y propició la grabación de un vídeo viral que dio la vuelta al mundo y que colocó su nombre en ese mundillo. «Surgió como una broma, pero desde ese momento mi carrera dio un giro radical», resume.
El vídeo en cuestión, en el que Joaquín le dice a Haaland que en el Betis no había sitio para él, corrió como la pólvora de móvil en móvil y le dio visibilidad entre los compañeros de ambos jugadores. Desde ese momento, hace ya dos años, apenas hay jugador de fútbol que visite Marbella y que no reclame sus servicios.

Aunque no desvela demasiados detalles por temas de confidencialidad, Luis confiesa haber cocinado en algunas de las villas más lujosas de toda la Costa de Sol. Y no sólo para futbolistas, sino también para otras personalidades del mundo del deporte o la cultura como el piloto del F1 Niki Lauda o el casting completo de Los Juegos del Hambre Sinsajo Parte 2.
El contacto para este tipo de perfiles lo comenzó realizando a través de personas que se dedican a la intermediación (concierge), aunque con el paso del tiempo «todo futbolista que vuelve a Marbella me llama directamente porque me gusta crear un entorno cercano y familiar con los clientes».
Asegura que «cada cliente es un mundo» y que una de sus señas de identidad es que se amolda al completo a sus clientes. Tras cocinar en diferentes países y en todo tipo de restaurantes, él puede ofrecer una cocina mediterránea, francesa, italiana o asiática. «Yo cocino un menú exclusivo para cada cliente; no me gustan los menús cerrados», señala.
El Brunch del Mercadillo
Y en este contexto de Marbella y lujo surge la colaboración con Hard Rock Hotel, donde todos los sábados del verano firmará la propuesta gastronómica de 'El Brunch del Mercadillo', un evento que se celebra coincidiendo con la apertura del cercano mercadillo de Puerto Banús, uno de los más emblemáticos de España.
Luis avanza que con el brunch se quiere dar a los clientes una oferta «más gamberra y más canalla a semejanza de la imagen de Hard Rock». Desde las 12 hasta las 15 horas los asistentes pueden disfrutar de barbacoa, diferentes tipos de comida, bebida ilimitada con una amplia variedad de cócteles, música y animación en directo por 60 euros (30 para los menores de 12 años).
Respecto a la oferta gastronómica apunta que hay «un poco de todo», desde la referida carne a la barbacoa hasta pasta hecha en el momento, brioches, huevos benedicte, tortillas a la tartufata, frutas de todo tipo, zumos naturales, dulces o postres. «Montamos mesas altas y bajas para que la gente pueda interactuar, bailar y pasárselo bien», añade.
Comentar es una ventaja exclusiva para suscriptores
¿Ya eres suscriptor?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.