Camacho vuelve a mostrar los galones en el Málaga

Veinticuatro horas después del partido las sensaciones son otras. El equipo fue desde un principio a por el partido, y ellos apenas crearon ocasiones. En este encuentro no se nos puede reprochar nada y creo que es el camino para seguir adelante. Si queremos ganar partidos esta es la actitud. Así las victorias llegarán, sentenció el maño. En efecto, aunque el Málaga apenas generó ocasiones de peligro, sí fue un equipo ambicioso y sólido en la parcela defensiva.

En todo caso, el jugador asume que el inicio liguero ha sido decepcionante, con dos puntos de doce frente a un calendario propicio, lo que ha dado lugar a muchas pruebas para tratar de sacar partido a la plantilla. Cuando no salen las cosas como se esperan siempre se habla de sistemas de juego, de ansiedad, de culpables. En este caso todos somos culpables. Hay que cambiar el rumbo del equipo y lo único que hace falta es un buen resultado para que la plantilla saque todo lo que tiene, insistió.

Más que pensar en el trabajo del entrenador, Juande Ramos, Camacho puso la lupa en el vestuario: Somos los futbolistas los encargados de dar la vuelta a esta situación. El equipo tiene el martes (20.00 horas, ante el Eibar y en La Rosaleda) otro partido, otro momento para sacar tres puntos, y es una buena oportunidad para cambiar la opinión de la gente, la racha y coger confianza nosotros mismos.

De la misma forma, el centrocampista aludió al factor humano como pilar para la recuperación. Siempre se ha caracterizado este vestuario, al menos en los seis años que llevo, en que somos una pequeña familia, sostuvo, y destacó también que pese a que no se haya ganado, hay aspectos que destacar. A ver si salen los frutos de la pretemporada y de estos cuatro partidos, que aunque no nos hayan ido bien, en ellos siempre se puede sacar cosas positivas. Hay mucha gente nueva y un entrenador nuevo, pero él con las características nuevas de los jugadores tiene que poner todo en marcha.

Mensaje

Finalmente, Camacho lanzó un mensaje al aficionado que sigue al equipo y al que asistirá el martes a La Rosaleda: Es difícil pedir la tranquilidad, pero deben confiar en nosotros. Debemos ser un equipo que lo deje todo en el campo, y así la afición siempre será agradecida. Lo que importa son los tres puntos, que el equipo gane y tenga buenas sensaciones en el campo, pero toda esa confianza se logra ganando. Sólo así la afición saldrá contenta del estadio.