Miguel Molina, presidente de las Peñas Malaguistas: «Queremos el Mundial, pero que cumplan lo que prometieron con el aforo»
El presidente de esta Federación lo tiene muy claro: «Les hemos pedido que busquen una solución para los abonados; no nos pueden dejar en la mitad»
El alcalde Francisco de la Torre depositó la gran responsabilidad del futuro de los proyectos que tienen las instituciones en marcha en relación a la ... sede para el Mundial 2030 en los aficionados y el propio Málaga. A partir de ahí habrá que ver. De ahí que se haya convertido en protagonista directo de esta historia el presidente de la Federación de Peñas Malaguistas, Miguel Molina. Esta agrupación, de hecho, reaccionó días atrás colocando pancartas en distintas zonas de la ciudad en protesta por el anuncio del Ayuntamiento en relación a la reducción de aforo en el estadio de atletismo en el periodo en el que esta instalación será utilizada por el Málaga (podían ser, incluso, unos 12.500).
Molina se ha reunido ya con los responsables municipales para hablar de este asunto, y lo hará de nuevo este sábado (junto al resto de las instituciones). Este responsable de las peñas confiesa a este periódico el mensaje que ha transmitido: «Les hemos dicho que queremos el Mundial, pero también que cumplan lo que prometieron con el aforo del estadio de atletismo. Nos da igual en un lado que en otro, pero que puedan entrar los abonados».
No quiere entrar en los pormenores de la sede de La Rosaleda para el Mundial, que supondría que la ciudad dispusiera de un estadio de primer nivel para las próximas décadas, sino que prefiere centrarse en la afición malaguista, para que esta pueda acompañar a su equipo en los partidos de casa durante las obras en el campo de Martiricos. «Les hemos pedido que busquen una solución a los abonados, sobre 25.000, que cumplan lo que prometieron», insiste.
Recuerda que la afición del Málaga está creciendo y que un recorte demasiado importante en este momento, al margen de los perjuicios económicos para el club, podría ser un desastre, una paso atrás. «Tienen que garantizar que entra la afición, porque el Málaga está atravesando por un momento dulce y nos pueden dejar en la mitad. Nuestra preocupación son los abonados, que puedan estar en el campo», repitió Molina.
Entiende que esta decisión de disponer de un escaso aforo, en el caso de que se llevara adelante, frenaría la ola positiva que vive la masa social malaguista pese a que el club continúa intervenido judicialmente y sin dueño en este momento. «Queremos que venga el Mundial, pero que se cumpla lo que se dijo. No se puede partir a la afición del Málaga, porque de esa manera no podemos crecer, sobre todo en la situación que está el club», subraya el responsable de la Federación de Peñas Malaguistas.
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