Un Málaga sin gol sucumbe tras un desajuste defensivo (2-0)

El Málaga dispuso de varias ocasiones, pero no entraron, mientras que el Elche no tenía más remedio que insistir hasta que finalmente llegaron los goles, el segundo en el descuento cuando los blanquiazules estaban volcados sobre la meta contraria. Ahora será necesario esperar a la última jornada del campeonato para buscar una despedida algo más dulce de los blanquiazules. Tras cerrar la permanencia la semana anterior, el objetivo ahora del equipo de Martiricos se centraba en responder de la forma más digna hasta el final y, sobre todo, probar a algunos jugadores para la temporada que viene. La clasificación ahora apenas importa, pues las variaciones van a ser mínimas. Pierde una posición.

Pellicer cumplió con lo prometido y utilizó un equipo competitivo, con el mismo sistema (una defensa con tres centrales). Hizo dos cambios en relación al anterior encuentro: uno obligado, con la entrada de Gabilondo por la izquierda, y el otro en el centro, con la presencia de Manu Molina. El técnico no le quiso dar facilidades a su rival con una revolución en el once, sino que buscó el mejor resultado posible. Aunque el Elche ponía mucho en juego en su lucha por ascender y comenzó el encuentro apretando sobre el área visitante.

El cuadro ilicitano tuvo dos oportunidades claras en los primeros minutos, una de Agustín Álvarez y la otra de Nico Castro. En esta última el balón se estrelló en los dos postes en un disparo que no entró en la meta de Herrero por muy poco. Parecía el presagio de un desastre, pero el Málaga intensificó su presión para equilibrar el partido y lo consiguió, si bien el cuadro local dispuso todavía de alguna opción más en la primera fase del choque.

Un disparo de falta fuera por parte de Antoñito fue la primera oportunidad para un Málaga que poco a poco adelantó sus líneas y alejó de su portería a los delanteros contrarios. Con el paso de los minutos dispuso de más posesión y profundidad, aunque sin demasiada suerte ni acierto en las aproximaciones de más peligro. Era previsible que los locales tendrían que apretar algo más en la segunda parte en un partido casi decisivo para ellos.

Y en los primeros minutos de la reanudación Lobete pudo adelantar al Málaga al quedarse solo ante el meta contrario, pero falló. Aunque también pudo marcar Antoñito, pero su buen disparo cruzado lo desvió el portero. El equipo de Pellicer estaba ya amenazando con mucho peligro. Su verticalidad era una pesadilla para un Elche que tenía muchas dificultades para frenar los contragolpes visitantes.

El dominio local no se traducía en oportunidades, salvo un lanzamiento lateral que sacó Herrero y el gol conseguido Sory Kaba de cabeza. El tanto llegó en un desajuste defensivo en el que Gabilondo permitió el centro y Nelson no pudo impedir el golpeo de balón con la cabeza. El tanto fue decepcionante para los blanquiazules, que estaban ofreciendo una buena imagen. A partir de ahí buscaron la meta contraria, pero ya sin grandes oportunidades para igualar el encuentro. Y en el descuento, aprovechando que el Málaga estaba volcado en busca del gol, el Elche marcó el segundo en otro pase de Josan y en este caso con el remate de Mourad, con el pie. Fin de la historia. Otra derrota, y queda una jornada.