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El plazo de fichajes para el Málaga, como para todos, acabará el próximo lunes, el 3 de febrero. Los planes pasaban por reforzar la plantilla con un delantero, algo que, por lo que se puede observar, tampoco está siendo fácil para la dirección deportiva del ... club, con Loren Juarros a la cabeza. Pero las dudas se van ampliando a medida que avanza el año, pues el equipo de Martiricos ha comenzado mal la segunda vuelta del campeonato, sumando sólo un punto en los tres últimos encuentros, sufriendo dos derrotas consecutivas. Esta situación, en cualquier caso, avala la necesidad de reforzar la plantilla para afrontar con más garantías el resto de la Liga.
El club quería sólo a un delantero, aunque nunca descartó la posibilidad de que llegara algún jugador más, siempre que se tratase de una buena oportunidad para mejorar el nivel del equipo. Sin embargo, el final del plazo de fichaje se acerca y los problemas para encontrar tan siquiera al goleador se mantienen. En última instancia, desde la dirección deportiva apostaron por encontrar algún refuerzo al final del mercado, es decir, esta misma semana. La opción de un futbolista cedido 'in extremis' de Primera sigue estando muy presente en la entidad de Martiricos.
El Málaga dispone del dinero justo, pero suficiente para acometer los movimientos imprescindibles para retocar la plantilla. En este sentido, la dirección deportiva pretende mantener el equilibrio económico de sus jugadores, intentando integrar de la mejor forma posible a los canteranos. Y sigue pendiente la renovación de Antoñito, al que el club le ha hecho una oferta importante para que continúe de blanquiazul. En cualquier caso, el club dispone de margen en su tope salarial, y también puede reducir sus costes con la salida de jugadores.
El primer movimiento fue la cesión de Moussa al Marbella, lo que deja una ficha libre para que llegue algún jugador en los próximos días, pero también hay otros componentes de la plantilla que podrían marcharse para buscar más oportunidades en otros destinos. El delantero Castel, por ejemplo, podría optar por salir debido a que es el punta con menos minutos. Ahora está lesionado, aunque puede haber alguna novedad con él. Y también está pendiente qué ocurrirá con Haitam, extremo al que quieren algunos equipos de Primera RFEF. En este último caso, una cesión puede ser aceptada por todas las partes para que el jugador pueda rodarse en una categoría inferior después de tanta inactividad.
El objetivo del Málaga, en relación al número de jugadores en la plantilla, debería centrarse en reducirlo lo máximo posible, pues dispone ahora, tras la marcha de Moussa, de 27, incluyendo a los tres habituales de la cantera, pero podría elevarse nuevamente a 28 si se añade Chupete, con el que puede ocurrir lo mismo después del gol conseguido frente al Deportivo y sus buenas actuaciones con el conjunto filial.
En esta recta final del mercado, el Málaga tendrá que volver a evaluar el rendimiento individual de sus futbolistas para tomar las mejores decisiones, siempre teniendo en cuenta las conocidas dificultades de este mercado invernal, en el que los jugadores salen de sus equipos fundamentalmente porque no suelen participar, no juegan. De ahí que sea imprescindible analizar en profundidad a cualquier candidato para no cometer errores.
Lo que sí parece claro es que el equipo blanquiazul sufre mucho para sumar los puntos. Aunque su trayectoria, pese a las dos últimas derrotas, sigue siendo buena, pero en el club y el propio entrenador deberán analizar la situación para estar preparados ante cualquier eventualidad. Se supone que habrá alguna novedad en breve, siempre que aparezcan opciones aceptables.
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