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marina rivas
Lunes, 14 de octubre 2019, 00:05
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A la vista está que todavía falta trabajo y tiempo. Sin embargo, hay un aspecto alentador en este Málaga femenino que consiguió el sábado en el campo del Cáceres su primera victoria de la nueva temporada en la Segunda División: es, junto al Alhama murciano, el único conjunto del Grupo Sur que ha logrado sumar en las últimas cuatro jornadas de manera consecutiva. Ni siquiera lo consiguió el líder, el Villarreal, que cayó en esta quinta jornada ante el Pozoalbense cordobés (2-1). Pasa ahora a empatar a doce puntos con el Fundación Albacete, que se sitúa a la cabeza sólo por contar con un tanto más a su favor en el 'average'.
Esta es una seña más de la igualdad que caracteriza a la reestructurada segunda categoría nacional, renombrada como Reto Iberdrola. En sólo cinco jornadas, todos los equipos de la clasificación de este grupo ya saben lo que es perder.En el caso del Málaga, sólo una vez, en la primera jornada ante el Santa Teresa de Badajoz, que le remontó en su feudo (2-1). A partir de ahi, el cuadro de José Herrera aprendió a sumar, aunque a base de empates y muy escaso de goles: 1-1 ante el Granadilla de Tenerife B, 0-0 ante el Alhama y 1-1 ante el Pozoalbense. Estos tres resultados colocan a la entidad costasoleña como el equipo que más empata de su grupo hasta el momento.
La suerte cambió por fin el pasado sábado, con la motivación de haber ganado en un campo complejo. Y es que el cuadro cacereño se mantenía invicto en su feudo hasta entonces. Edna anotó su primer tanto como blanquiazul, empataron las locales para el 1-1 al descanso y luego remató la capitana Adriana, ya en la segunda parte, para dar los primeros tres puntos al equipo. Sin embargo, pese a la alegría, la situación del Málaga en la tabla no ha cambiado demasiado. Al cierre de la jornada, pasa del decimotercer al undécimo puesto. Se aleja un poco más del descenso (puestos decimoquinto, del Juan Grande, y decimosexto, del Collerense), pero todavía no le es suficiente para entrar en la parte media-alta de la clasificación.
En ese límite (en el octavo puesto) se encuentra ahora el Valencia B, filial del equipo de Primera Iberdrola y sólo con un punto más que el cuadro blanquiazul, lo que invita al optimismo. Y es que todavía es buen momento para que el Málaga demuestre que quiere optar a esa única plaza por el ascenso que otorga cada grupo. De hecho, el líder y su perseguidor inmediato están a sólo seis puntos del conjunto costasoleño. La dinámica al alza, el triunfo y los avanzados procesos de recuperación de jugadoras como Ruth (que todavía no ha debutado) suponen ahora una inyección de moral para el equipo para ir en busca de su segunda victoria. La siguiente jornada será en la Federación, el domingo, ante el Valencia B.
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