Ayala: «El objetivo no es otro que ascender a Segunda; es lo que merece el club»

-Tener un bloque de la casa siempre refuerza el proyecto…

-Sí. Además, las veteranas que vienen de vuelta ya tienen los valores superreconocidos y se los inculcan a las jovencitas, aunque las jovencitas realmente ya llevan aquí desde infantiles… Esto es una familia. El compromiso es total y viven por y para el fútbol y eso esperemos que sea clave para que llegue el objetivo, que no es otro que ascender a Segunda, que es lo que merece el club.

-¿Cómo le dijeron que se hiciera cargo del primer equipo?

-Cuando el equipo descendió, parecía que iban a mantener al cuerpo técnico, pero cuando se acercó la pretemporada el club pensó que el entrenador más adecuado era yo, por todos los años que llevo en la cantera y porque conozco muy bien la plantilla y la categoría. Querían un hombre de la casa y yo estoy superilusionado.

-¿Cómo define su estilo de juego?

-Un juego combinativo, que haya verticalidad, que lleguemos mucho al área rival y que cuando perdamos el balón, que muramos recuperándolo. Hay que ser asfixiantes y buscar al equipo contrario, asociarse… Correr con y sin balón y con trabajo. Así llegarán los resultados.

-Con el filial se ha mantenido en la mitad de la tabla de esta categoría. Con un primer equipo se aspira al ascenso…

-Sí, ese es el objetivo. Es diferente trabajar con un primer equipo y un filial, no son los mismos objetivos; aquí están marcados.

-El año pasado no salieron las cosas por ningún lado…

-Fue una pena. La gente veía que la plantilla era supercompleta, para no pasar los apuros que se pasaron, y al final así es el fútbol. Si no entra la bolita…

-Para las contadas jugadoras del pasado año que se han quedado este, ¿será difícil competir en una categoría tan inferior?

-Ese era el temor del club y cuerpo técnico, pero desde el primer momento el grupo ha estado muy interesado e involucrado en todo: el calendario, el inicio de la pretemporada… Hemos vuelto y ha sido espectacular. Cuerpo técnico y plantilla de jugadoras estamos muy ilusionados. Eso es lo que debemos plasmar en el campo para lograr los objetivos, y sobre todo que ellas disfruten jugando.

-Tendrán que estar pendientes de que, si llega alguna mala racha, la frustración no haga mella en la plantilla, como sucedió el año pasado...

-El objetivo está claro, pero no queremos ni presión ni factores negativos, siempre desde el respeto y la competitividad. El mensaje es que nosotros confiamos muchísimo en ellas. Si viésemos que no tienen virtudes para llegar ahí, cambiaríamos la manera de trabajar y nos adaptaríamos, pero la confianza es plena.

-Y entienden que otras jugadoras de la casa se hayan ido a proyectos superiores, ¿no? Como María Ruiz…

-Claro. Por desgracia, todas las malagueñas que se han ido han pasado por equipos conmigo. Ellas siempre buscan no perjudicar al club, pero también seguir avanzando, y con todo su dolor, han decidido dar ese paso porque sentían que no iban a progresar ahora en este club con el descenso. Algunas me pusieron un mensajito diciendo que a lo mejor no se habrían ido si hubieran sabido que yo iba a ser el entrenador. Pero son grandes futbolistas y les deseo lo mejor. Mientras yo esté ahí, las puertas estarán abiertas.

-Con proyectos económicos diferentes, ¿cómo es el presupuesto? ¿Dista mucho del año pasado?

-Hay que darle las gracias al club por el esfuerzo de seguir apostando por el fútbol femenino, pero tras el descenso el presupuesto baja, no hay tantos patrocinadores, las jugadoras de la casa tienen que hacer un esfuerzo por quedarse porque saben que el club necesita de gente como ellas… Al final esto se hace por el club de nuestra vida, pero esperemos que vengan tiempos mejores y se les pueda ayudar económicamente a todas.

-Eso dependerá también de la situación del masculino…

-Claro. Se está haciendo un gran esfuerzo con el masculino a nivel de lo que se debía y lo que hay ahora; Manolo Gaspar, que todo lo que hace lo toca con una varita; los jugadores responden… Al final todos dependemos del primer equipo, y cuanto más alto esté, mejor.

-¿Cómo de factible ve que el Málaga femenino vuelva a Primera en tres o cuatro años?

- Yo estoy muy ilusionado, aquí hay mimbre. Lo que más cuesta son los ascensos. Cuando aquí se subió, apostaron por gente que no era del club, era todo una incógnita, y parecía que a raíz de los fichajes todo se iba a solucionar y no fue así. Esos 25 fichajes, ¿mejoraban lo que había aquí? El entrenador pensaría que sí…

-La nueva apuesta por un proyecto de la casa vuelve gracias al regreso de Manuel Hernández Navarrete e Isa Guerrero.

-Estando ellos, creo que no vamos a tropezar con la misma piedra. A la larga este club tiene que llegar donde se merece en categoría femenina y masculina.