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El central Álex Pastor compareció este miércoles, una hora antes del comienzo del entrenamiento, para valorar y repasar los distintos temas que afectan a la ... actualidad del Málaga. Comenzó haciendo balance de esta primera mitad del curso, a la que se refirió de una forma muy positiva: «Creo que ha sido una buena primera parte. El equipo ha hecho buenos partidos y estamos reflejando la idea de juego del míster. Tenemos al equipo con 31 puntos, en la mitad de la clasificación y estamos tranquilos».
Tras caer en la plaza de Anduva, uno de los feudos más complicados de Segunda, el Málaga afrontará ahora una serie de compromisos complicados, todos en línea: Zaragoza, Racing y Levante. «Creo que hicimos un buen partido. Le plantamos cara a un Mirandés que este año lo está haciendo bien. Salimos a su campo y fuimos nosotros, aunque se nos fue por detalles, pero bastante bien. El míster me cambió en el descanso, porque tenía tarjeta amarilla, pero es algo normal», dijo sobre el último partido, y se refirió a la 'cuesta' del calendario con tranquilidad. «Todos los partidos son muy difíciles y muy bonitos. El de Zaragoza va a ser bonito, porque los dos tenemos prácticamente los mismos puntos y vamos a demostrar lo que tenemos que hacer», declaró. «No hemos empezado a estudiar al equipo, pero es fuerte. La clasificación no refleja el nivel de calidad que tiene. Y nosotros también merecemos algún punto más», dijo sobre el rival.
El partido se jugará en La Rosaleda y, preguntado por las cosas que más le han sorprendido de Málaga en sus primeros seis meses como blanquiazul, se refirió a la afición como una de ellas. «Es una afición que siempre está apoyando, incluso cuando los resultados no han sido del todo buenos. Hay una conexión especial entre jugadores y equipo y eso es algo muy bonito. Nosotros salimos a pelear cada partido porque es lo que mejor podemos hacer por ellos», declaró al respecto.
Asimismo, reconoció que se nota mucho eso de jugar en casa o fuera: «Se nota. No es lo mismo hacerlo con casi 30.000 personas que te están apoyando que fuera. Es muy bonito. Nos empujan cuando más lo necesitamos. Hemos ganado partidos en los últimos minutos también por eso. Ojalá que fueran 42 partidos en casa este año». Más allá, aseguró no saber nada sobre el hipotético de que el Málaga tenga que mudarse al Ciudad de Málaga por las obras de La Rosaleda cara al Mundial 2030.
Con una sonrisa, afirmó que se encuentra en el mejor momento de su carrera: «Estoy disfrutando de un momento único, que es el mejor momento de mi vida. Estoy en un club donde siempre soñé estar e intento disfrutarlo, ser feliz y disfrutar también de mi familia, que viene mucho a visitarme. Ahora a seguir luchando por el equipo y que sean muchos más los años que esté aquí».
Para acabar, fue preguntado por tres nombres propios. Primero, por Moussa, que se ha ido cedido al Marbella este enero, y después por la situación de los jóvenes Murillo y Chupete. «Pues la verdad es que me llevo muy bien con él y tengo una buena relación y me da pena que haya tenido que dejarnos. Es un gran central con unas muy buenas condiciones que no hemos podido ver, ni se ha podido exprimir aún, pero le deseo lo mejor y que ojalá esté pronto por aquí para apoyarnos», dijo sobre el primero. «De Murillo siempre he dicho que me parece un pedazo de jugador, y puede que la salida de Moussa le dé más oportunidades. Va a seguir trabajando y el míster decidirá si tirará de él. Y Chupete lo está haciendo bien con el filial, está entrenándose con nosotros y ya pues será el entrenador quien decida cuándo debe jugar», concluyó.
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